VILLAHERMOSA. La Comisión Estatal de Agua y Saneamiento (CEAS) distribuyó agua para consumo humano contaminada con heces en los municipios de Teapa, Balancán, Jonuta, Cárdenas y Huimanguillo, donde más del 80 por ciento de las muestras arrojaron la presencia de coliformes fecales, según un estudio realizado por la Secretaría de Salud estatal entre enero y mayo del 2024.
En respuesta vía transparencia a El Heraldo de Tabasco, la dependencia señala que en el periodo mencionado se tomaron 390 muestras del agua que llegó a domicilios del estado para su análisis de calidad, de las cuales sólo 161 cumplieron con la norma, las restantes 229 muestras salieron con presencia de contaminantes fecales, siendo más grave la situación en los municipios referidos.
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En Teapa, de 26 muestras tomadas en los primeros cinco meses del año, sólo cuatro se apegaron a la norma; el 85 por ciento restante muestra presencia de coliformes fecales; mientras que en Balancán, 20 de 24 muestras están en la misma situación; en Jonuta 82 por ciento reportaron presencia de heces; y Huimanguillo y Cárdenas salieron empatados, sus resultados muestran que 80 por ciento de las aguas analizadas arrojaron presencia de contaminantes.
En la capital tabasqueña, la CEAS también distribuye líquido de mala calidad, pues denuncias señalan que a los hogares llega agua chocolatosa.
Los habitantes de la colonia Gaviotas Norte de Villahermosa coincidieron en que regularmente sale de sus llaves agua color café y que llega tan sucia y maloliente que a veces aunque la filtren con métodos caseros no sirve para lavar la ropa o bañarse.
María Solis Palma, señaló que por lo general recibe agua de mala calidad, “como con lodo y apestosa a pescado”.
Dijo que cuando no llueve sale clara, pero durante los meses de lluvia sale muy sucia y para utilizarla tienen que dejar que se asiente esa suciedad.
“Para usarla tenemos que ponerle cloro y a veces un poco de cal; para tomarla la ponemos a hervir“, expresó.
“Toda la vida ha salido sucia, es rareza que llegue limpia y en este tiempo le echan la culpa al río”, dijo Enrique Hernández, quien vive en la calle Mario Díaz Pérez.
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Para José Manuel Arias Rodríguez, de la Asociación Ecológica Santo Tomás, esta situación del agua contaminada con heces fecales “no es nuevo, pero sí demuestra que el desinterés gubernamental, ya que desde 2013, Santo Tomás se encontró la presencia de coliformes fecales en el agua que se distribuye en zonas indígenas de Tabasco; pero no sólo eso, esta agua que los organismos operadores distribuyen en la entidad también contiene metales pesados como plomo, cadmio y aluminio, por lo que la situación es preocupante”.
“En su momento, nosotros presentamos una queja por esta situación ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), la cual nos dio la razón y emitió diversas recomendaciones contra la CEAS que el organismo estatal no pudo hacer cumplir, y que hasta 2019 el titular de la dependencia declaraba que buscaba se cumpliera“, comentó Arias.