El parque central de Palenque, se ha convertido desde hace tiempo en punto de reunión de la comunidad migrante, dónde principalmente ciudadanos de Haití y Honduras ven pasar los días para continuar su camino a Estados Unidos; entre las historias de migrantes se encuentran la de María y Wid, quienes comentaron a El Heraldo de Tabasco el porqué intentan llegar al país de norte.
Cada persona que se encuentra en este parque tiene una historia como la de la señora María Tránsito Rodríguez, quien junto a su hijo Luis de nueve años acampan en el lugar en cuestión desde hace un mes y medio, en el que han tenido que dormir en el suelo.
Ella salió hace mes y medio de San Pedro Sula, Honduras, porque fue víctima de extorsión y pide asilo en México.
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“Estoy mejor que en mi país y mi niño y yo no hemos aguantado hambre, salimos y la gente nos ayuda para la comida, a veces dormimos en el parque, a veces nos ayudan a que pasemos la noche en otro lado donde viven unas amigas”.
La entrevistada agrega: “Allá (Honduras) hay mucha extorsión, mucha mara, allá a la edad de mi niño ( nueve años ) los quieren introducir a vender droga, por eso no puedo regresar". Señala que en su país ha quedado una hija de 22 años la cual está sola, por lo que espera en un futuro reunirse con ella, aunque por ahora no es posible.
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Para poder obtener recursos, María vende chicles, los que ofrece todos los días en el parque Central de Palenque.
Otro caso es el de Wid Balcen de 30 años de edad, quien dejó su natal Haití y se trasladó a Santiago de Chile, donde vivió seis años, ahora su meta es llegar a Brooklyn, lugar donde tiene varios amigos. Señaló que hace tres semanas llegó a México y busca llegar una vez que pueda a la frontera norte.
El joven Wid ha tenido recursos para poder vivir en su estancia en Palenque, actualmente paga 100 dólares cada mes, para evitar dormir en la calle o el parque.
Ambos entrevistados mencionaron que han hecho los trámites correspondientes en la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR).
