—Ya ha pasado demasiado tiempo. La gente tal vez ni se acuerda. Sólo recuerdan las balaceras recientes, de los muertos viejos ni quién se acuerde. —Posiblemente, sí. Pue' que sí. Un cementerio de vidas rotas, ni quien lo dude. Pero hay que sacarlos a la luz.

Son muertos de una guerra que no se termina. Y si la gente no sabe que estamos en guerra, si no se da cuenta, esto se puede poner peor.

El otro saca varios libros gruesos como tabiques. Son legajos, carpetas de investigación, averiguaciones previas que duermen en un limbo legal y administrativo. Acumulan el polvo de los años y de la impunidad.

—Vamos a ver —dice el guardián de los libros rojos, el cancerbero de los hechos de sangre. Comienza a leer entre fechas y números de una nomenclatura que sólo él conoce.

—Aquí hay uno de cuando las cosas se empezaron a poner feas. Del 2006, cuando ejecutaron al comandante de la judicial Carlos Manuel Villegas, allá en Cunduacán. —Ajá... —El día 15, si te acordarás, cayó Z-10, Mateo Díaz López, en un tiroteo en la Casa de Justicia que hizo historia... —Cómo no recordarlo. Murieron dos policías, uno de ellos a balazos y otro calcinado dentro de su patrulla por una granada RPG... —Eso mero... pasaron otras cosas, antes.

Para el 19 de Abril del 2007, unos meses después, las ejecuciones contra policías arreciaron. Era un reto franco y abierto a las autoridades por parte de los Zetas. Mira, aquí está toda la historia... "una patrulla en la que viajaban cuatro elementos de la policía preventiva, que venían de escoltar la caravana de las embajadoras, fue emboscada en las inmediaciones de la glorieta Andrés Sánchez Magallanes. En el lugar murieron dos de ellos y dos días después se murieron los otros en el hospital.

—De la patrulla que supuestamente participó en la detención del 'Chelo Akal'... —Eso es lo que se dice... por aquellos días también mataron al comandante Ángel Sánchez Torres, decano de la subdirección de la policía judicial e investigador de la policía preventiva. Lo venadearon sobre la avenida Adolfo Ruíz Cortines cuando circulaba en su Sentra...

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Las hojas que revuelven huelen a humedad. Muchas están deterioradas y se van a podrir antes de que alguna dependencia las logre digitalizar. La tinta es endeble, pero la memoria lo es más.

—Aquí está la que andabas buscando... —A ver... Sí, esa mera es. Es la carpeta de investigación de la ejecución de Raúl López López, director de Averiguaciones Previas de la PGJ. —O los responsables son los integrantes de la banda más sangrienta en la historia de Tabasco, o la incompetencia de las autoridades prefiere echarle la culpa a los de siempre... sus nombres saltan una y otra vez entre la montaña de averiguaciones previas de la entonces PGJ...

—Será que siguen en prisión? —Por la tranquilidad de todos, eso espero... —Les fincaron cargos de asesinato, secuestro y portación de armas de fuego de uso exclusivo del Ejército. También fueron parte del comando que asesinó al responsable de todas las investigaciones que se realizaban por aquellos años en contra de la delincuencia organizada.

—Fue el 18 de mayo del año 2007. En el asesinato del doctor en Derecho Raúl López López participaron los sicarios Carlos Zentella (a) "El paletón", y a Luís Cerino (a) "El Shakira".

En el documento se puede leer lo siguiente: "Que el asesinato mencionado fue porque miembros de la organización delictiva estaban señalados en investigaciones encabezadas por el hoy occiso y que por ello determinaron asesinarlo. Que para llevar a cabo la operación se transportaron en una camioneta modelo Sienna de color dorado y en una camioneta Patriot, color verde militar... "Que Luis Cerino alias "El Shakira" en interrogatorios confesó su participación en el asesinato; que siguieron por dos días al funcionario y que alguien de adentro de la misma corporación lo puso en la mira de sus verdugos...

"Que fue circulando en su Pointer cuando se lo encontraron, ya que ellos venían de estarlo esperando en la PGJ, donde planeaban matarlo; el iba y ellos venían y por eso lo siguieron, y que calles adelante el doctor se dio cuenta y trató de escapar pero que lograron alcanzarlo cerrándole el paso, que dispararon en repetidas ocasiones con armas largas y que muchos impactos dieron en el auto del director de averiguaciones previas, y que este trató de escapar a pie y que así mismo lo persiguieron para dispararle en muchas ocasiones y luego, se acercó a darle el tiro de gracia...

—¿No menciona quién le puso el "dedo" al funcionario? —No hay más datos. Sólo dice; "Los hechos ocurrieron la tarde del dieciocho de mayo del año 2007, se dieron en el interior del fraccionamiento Olimpo ubicado en la ranchería Río Viejo. Expediente G-II-55/2007" —Parece un epitafio... —Todo este lugar es como un enorme panteón. De muertos silenciosos que gritan historias... como bien dices, reportero, "un cementerio de vidas rotas".