"Santo Sapo": el sanguinario policía al servicio del crimen

Fue jefe de plaza de Los Zetas en Tabasco, al que se le atribuyen violentas ejecuciones de comerciantes, empresarios, policías, "contrarios", mujeres y periodistas

Héctor Trinidad | El Heraldo de Tabasco

  · miércoles 24 de febrero de 2021

Foto: Archivo | El Heraldo de Tabasco

Santos Ramírez Morales (a) “Santo Sapo”, jefe de plaza de los Zetas en Tabasco, era un policía ministerial violento y al que constantemente sancionaban de manera interna, hasta por faltista; permaneció activo 13 años en las filas de la Policía Ministerial y de ahí, en el último, se sumó al crimen organizado; su poderío duró tres años, hasta que acabó aprehendido por las fuerzas castrenses en el vecino estado de Chiapas.

Foto: Archivo | El Heraldo de Tabasco

Corrompió filas de la policía municipal y de la ministerial; ejecutó a un sinnúmero de hombres, en los que se contaron comerciantes, empresarios, policías, y “contrarios”; también a muchas mujeres, sin excluir a periodistas.

Sus inicios dentro del crimen organizado fueron como “Halcón”, luego jefe de sicarios y finalmente, jefe de plaza en La Chontalpa; no lo corrieron, causó baja de la policía.

Fue partícipe en asesinatos masivos; en la ejecución de la familia del extinto marino Melquisedec Angulo Córdova, perpetrada el 22 de diciembre de 2009 en la ranchería Quintín Arauz, del municipio de Centla; En Cunduacán, en la muerte y masacre de la familia del policía Baldomero García Rodríguez, y ocho familiares, avecindados en la ranchería La Piedra, en agosto de 2009; el 14 de febrero en la comunidad Monte Largo, perteneciente al municipio de Macuspana, donde “barrieron” con la familia del policía Carlos Reyes López, incluyendo entre ellos, niños, dejando así la estela de muerte de once personas; presuntamente junto con sus incondicionales, descuartizaron y decapitaron a dos mujeres, mientras que a tres, las violaron tumultuariamente y asesinaron de manera brutal y sanguinaria.

Logró llevar a la cárcel a solo 22 policías que se “alinearon” con él, y mantuvo bajo investigación a varios jefes incrustados en la Policía Ministerial. Fue capturado junto con 45 de sus aliados, entre guardias, sicarios y hasta familiares durante un impresionante operativo de las fuerzas armadas en Ocosocoautla, Chiapas, pero la justicia de Tabasco falló a su favor, y todo su presunto grupo delictivo, salió libre, meses después, excepto él.

¿Fin a la violencia?....

El 24 de noviembre del año 2011, la información correría como reguero de pólvora; era del exitoso operativo realizado por fuerzas castrenses, que dejaba ver el punto final al peor de los episodios de violencia en Tabasco. Santos Ramírez Morales (a) “Santo Sapo”, jefe de plaza de los Zetas en Tabasco, había sido capturado junto con 45 de sus incondicionales, incluyendo a su esposa y familiares, durante un enfrentamiento a balazos en una casa de seguridad enclavada en la comunidad Ocozocoautla, Chiapas.

Santos Ramírez Morales y/o Sergio Ramírez Torres, actualmente de 48 años de edad, nació el 31 de marzo en la ranchería Río Seco segunda sección, perteneciente al municipio de Cárdenas. Con estudios de secundaria a principios de Octubre del año 1995, ingresó a la entonces Procuraduría de Justicia de Tabasco como agente y fue dado de baja en mayo de 2008.


Foto: Archivo | El Heraldo de Tabasco

Pero, desde un año antes, ya venía operando para el crimen organizado. Infiltrado y desapercibido en las filas de la policía, logró involucrar a compañeros y policías, para pasar información de operativos.

Radicaba casi a las afueras del municipio de Cárdenas, Tabasco, frente a la Chocolatera; tuvo el control de la Chontalpa; se volvió sádico, violento, y no le importaba asesinar, fuera hombre, mujer o elemento de cualquier corporación, militar, federal, del estado o de la municipal; político o periodista.

Lee más: Jalpa de Méndez: Balacera entre policías deja un muerto

En su momento, Santos, le cayó bien a compañeros; era inicialmente, un agente asignado a la mesa de guardia de la Policía, en su último año, sorprendió a compañeros con la invitación constante de desayunos, comisa, cena; lo que fuera, él invitaba, y entre los invitados, estaban directores, subdirectores y otros. La zona de La Chontalpa, era un caos; secuestros, asesinatos, “levantones”… era el año de 2007.

Quienes tuvieron la oportunidad de convivir –por trabajo- con él, señalan que era todo un show, relajista, alegre, pero desconocían que tras su salida de labores policiales, iniciaba su otro “trabajo”: ser “halcón” al servicio del crimen organizado. Circulaba en toda la ciudad de Cárdenas, en su jetta rojo; y más cuando había secuestros, levantones, ejecuciones; merodeaba a distancia, se informaba… Cárdenas fue el principal municipio a tomar por el crimen organizado.

Sigue leyendo: Imparable la violencia en Tabasco; ejecutan a dos más

Ya fuera de la entonces Procuraduría de Justicia, Santos Ramírez logró la máxima asignación dentro de la escala de criminales. y fue gracias a misiones importantes de gran trascendencia, la de los Beltrán Leyva; venganza por la muerte de El Barbas, ocurrida en un operativo realizado por la Secretaría de Marina en Cuernavaca, Morelos donde moriría el elemento tabasqueño Melquisedec Angulo Córdova, esto el 16 de diciembre de 2019.

La información se remonta meses antes en donde, precisamente en agosto del mismo año, Santos Ramírez, opera en la incursión en un domicilio enclavado en la cuarta sección de la ranchería La Piedra, perteneciente al municipio de Cunduacán, donde ejecuta al policía de Comalcalco Baldomero García Rodríguez, y a ocho integrantes de su familia.


Foto: Archivo | El Heraldo de Tabasco

Pero también de otra, ocurrida el mismo año pero el 14 de Febrero, donde incursiona con un importante comando armado en la comunidad Monte Largo, perteneciente a Macuspana, y abren fuego contra todos los moradores; Ejecutan al policía Carlos Reyes García y abaten a siete menores, dos mujeres y a otro hombre.

Para finales de año, ya Santos Ramírez, era el responsable de la Plaza en Tabasco, teniendo el control de la zona de la Chontalpa. Del 2007 al 2009, logró consolidarse dentro del “Cártel”, por su amplia disponibilidad y relaciones con autoridades estatales y municipales, quienes le brindaban información de todo. Deshacerse de un contrario no era nada complicado, ni de policías de cualquier corporación.

Ya para 2010, la entonces Procuraduría General de la República (PGR), ofrecía 5 millones de pesos por información sobre el paradero de Santos Ramírez Morales llamado por los motes de “Santo Sapo”, “El Apá”, “El Gordo Ministerial y/o mini”

También lee: Acusan represión policiaca en ranchería de Cárdenas

Se había encontrado que el más buscado en Tabasco, había sido invitado a formar parte del crimen organizado por uno de los fundadores de los Zetas en 2007, precisamente por Sergio Ruiz Tlapanco, apodado “El zeta 44 y/o Tlapa” que era el encargado del grupo delictivo a Nivel Sur-Sureste, quien fue además parte del enlace, con el también criminal, Norberto Jiménez Martínez alias “el Peje” quien antes, fue el jefe de la plaza de Tabasco.

El Tlapa fue capturado en Puebla por personal militar el 9 de septiembre de 2009, y “El Peje” diez días después, en un cantabar ubicado en Tabasco.

Santos Ramírez se había convertido en el responsable directo de las actividades delictivas en los municipios de Huimanguillo, Cárdenas, Cunduacán, Comalcalco y Paraíso, y parte de Chiapas y Veracruz. Y día a día era más violento, sádico, brutal.

Foto: Archivo | El Heraldo de Tabasco

Era la feria de Tabasco 2010…

Gloria María Morales Madrigal, sería la Flor de Oro, Tabasco 2010. Oriunda de Jalpa de Méndez, la hermosa joven, estudiante de psicología, era la menos indicada para resultar electa; las preferencias se las daban a la candidata por el Centro, Daniela Mier y Teran, pero el pueblo eligió y el pueblo la llevó al triunfo a esta naturalmente choca.

No se empañó la fiesta de los tabasqueños, pero sí genero tremendo dolor; consternación, frustración pero a la vez, temor, miedo, zozobra.

Tres jovencitas procedentes del municipio de Cárdenas, habían arribado a la feria Tabasco; eran parte de un grupo cultural; una de ellas, del Valet Folklórico. Dyara Itzamara Gallegos Pérez, Jazmín Pérez Hidalgo e Ivonne Guadalupe Fuentes Ramón, amigas, de 20, 21, y 22 años de edad. Era domingo, habían llegado a temprana hora y luego de sus actividades darían un recorrido por el parque Tabasco.

Era Procurador de Justicia, Rafael González Lastra. El reporte de la desaparición de las tres jovencitas ocurriría a la media noche; todos las buscaban, nadie sabía que había pasado.

El lunes al amanecer, vecinos de la comunidad Habanero, perteneciente a Cárdenas darían cuenta del hallazgo; las jóvenes habían sido atacadas sexualmente; golpeadas, vejadas, lastimadas hasta con palos y piedras. Estos hechos consternaron a habitantes de Tabasco y más allá; dos meses antes, el 29 de febrero, habían sido secuestradas, decapitadas y descuartizadas dos jovencitas más y abandonadas dentro de costales, en esta zona de Cárdenas, por el río Mezcalapa, colindante con el municipio de Huimanguillo..

Mes y medio después, se supo en parte lo que había pasado. Santos Ramírez, estaba enamorado de una de ellas; naturalmente fue despreciado, y eso le llevó a idear, presionar, a una de sus integrantes del grupo delictivo; la obligó a ubicar y citar a una de las jóvenes; que dieran una vuelta, que todo era en buenos términos.

Centro, a la cabeza en ejecuciones en lo que va del 2021

Foto: Archivo | El Heraldo de Tabasco

Paso casi un mes y medio y vinieron las detenciones. El 21 de Junio, la Procuraduría de Justicia dio a conocer de cuatro detenciones y supo que entre los involucrados estaba Santos Ramírez Morales.

Los detenidos fueron identificados como José Manuel Benitez Carballo (a) “El Carballo”, Jaime Uresty Juárez (a) “El Cachibombo”, Nallely Tamara Lara Sosa, (a) “La Tammy”, y a Isaías Arquímedes Ramos Hernández, Kiko y/o El Pachuco y un menor de quien se omitieron generales.

Te sugerimos leer: Entre enero y febrero van 46 ejecutados en Tabasco

De acuerdo a la versión de los detenidos, la joven Dayra Itzamara hizo un mal comentario de él (de Santo Sapo), por lo que ordenó que la mataran.

Pero la versión que brindó en su momento la “Tammy”, fue que conocía a Dayra Itzamara, la invitó telefónicamente a una fiesta y se encargó de pasar a recogerla, junto con los otros dos detenidos, al parque Tabasco de esta capital, donde se llevaba a cabo la Feria Tabasco 2010. Dayra Itzamara invitó a sus amigas Jazmín Itzel e Ivonne Guadalupe, quienes aceptaron y finalmente también fueron ejecutadas en el ejido Habanero.

El Cachibombo, La Tammy y Kiko y/o El Pachuco fueron presentados a los medios de comunicación, mientras que a El Carballo, que había dado informes de estos hechos, ya se encontraba en prisión enfrentando procesos por homicidio y delincuencia organizada. Había temor de intentar capturar a “Santo Sapo”.

Foto: Archivo | El Heraldo de Tabasco

Golpe al criminal organizado

La situación cobraba fuerza en la zona de La Chontalpa, las ejecuciones eran constantes, se reestructuraba el Cártel del Golfo; Santos Ramírez, comenzaba a sufrir embates, pero seguía teniendo el control.

El 26 de enero de 2011, aparecería ejecutado por disparos de arma de fuego un hombre de 70 años de edad; según, el “cartel del Golfo”, al que había abandonado Santos Ramírez, le cobraba factura. Era su padre, don Margarito Ramírez Carrera, a quien abatieron y dejaron un escrito en su cuerpo; estaba atado de pies y manos con cinta industrial. Irónicamente, fue abandonado por el ejido Habanero. Los datos dieron cuenta que fue secuestrado por un comando armado cuando se encontraba en su domicilio ubicado en la colonia Vaqueiros del ingenio Santa Rosalía.

Vinieron una serie de importantes detenciones. La lista enumeró Alfredo Ceballos Ortiz (a) “El Vaselina”, aprehendido en diciembre de 2011, esto luego de figurar como supuesto jefe de Los Zetas en el municipio de Cárdenas, tras haber sustituido a Santos Ramírez "Santo Sapo", al ser capturado un mes antes en Chiapas.

En agosto de 2012, se capturó en Comalcalco a Carlos Guízar Valencia "El Z-43", quien presuntamente era el jefe de la Plaza en Tabasco. En octubre de 2010, fue detenido Seyki Ogata González, alias "Comandante Sierra", quien era el que coordinaba las plazas en Tabasco y norte de Chiapas.

Te recomendamos: Caen presuntos homicidas de estudiante de enfermería en Macuspana

Se recuerda que en septiembre de 2009, fue detenido Norberto Jiménez Martínez, alias "El Peje" o "El Puma", identificado como jefe de los Zetas en Tabasco y número dos de esa organización en el sureste del país. Individuo que fue relacionado en el atentado de marzo en 2007 contra el secretario de Seguridad Pública y general en retiro, Francisco Fernández Solís, quien logró sobrevivir, aunque su escolta pareció.

De igual forma en el atentado del ex subprocurador de Justicia de Tabasco, Alex Álvarez Gutiérrez, aunque finalmente, ocho años después, se concretó su muerte.

Foto: Archivo | El Heraldo de Tabasco

Santos Ramírez fue relacionado en el asesinato del locutor de radio Alejandro Fonseca, muerto en septiembre de 2008. Fonseca Estrada, conocido como "El Padrino Fonseca", fue abatido cuando colocaba mantas en repudio a los crímenes en la entidad en la zona de Tabasco 2000. En septiembre de 2009, fueron capturados dos integrantes de Los Zetas en Tabasco, identificados como Leonardo Sandoval Estrada y/o Daniel Alvarado Olvera, alias "El Sharpei" y Fredy Pérez Fuentes, alias "Fredy Mañas"; ambos involucrados en los multihomicidios de familias de policías en Macuspana y Cunduacán, así como en secuestros y asesinatos.

La caída de Santo Sapo y el descontrol

El 24 de noviembre de 2011, finalmente se daría a conocer la captura de Santos Ramírez Morales (a) “Santo Sapo”, realizada por fuerzas castrenses y especiales de las Fiscalías de Chiapas y Tabasco.

En la refriega, resultó herido en la espalda de un impacto de bala, cuando buscaba escapar a bordo de un auto acompañado de su esposa, Verónica Arena Quiroga, mientras sus secuaces enfrentaban a la milicia; 28 personas más, entre sicarios, halcones, policías y familiares fueron sometidos por las fuerzas militares en el operativo realizado en la comunidad Ocozocoautla, en Chiapas.

Se cumplimentaron diversas órdenes de cateo, y se incautaron 3 armas, un cargador, 13 cartuchos y 10 vehículos. Santos Ramírez fue acusado de diversos delitos como homicidios, secuestros, extorsiones, tráfico de armas y drogas.

Los detenidos fueron trasladados vía aérea de Tuxtla Gutiérrez a Villahermosa; él fue llevado al hospital Gustavo A. Rovirosa Pérez, donde se dispuso de un impresionante operativo de seguridad.

En la lista de capturados se dieron los siguientes nombres: Carlos Hernández Mendoza, Rolando Hernández Mendoza, María Corzo Díaz, Óscar Hernández Martínez, Eli Hernández Mendoza, Sergio Chanona Galdámez, Augusto Morales Castro, Santos Antonio Liévano Díaz, Yolanda de la Cruz Montoya, Sandra Morales Ramírez y Dulia Ramírez Morales.

Así como, Adali Díaz Hernández, Abel Hernández Aguilera, Benjamín Hernández Gutiérrez, Mariana Palma Méndez, Abel Hernández Martínez, José Carlos León Vázquez, Manuel Hernández Paredes, Verónica Arena Quiroga, Federico Hernández Gutiérrez, Gonzalo González Ruiz y Heriberto de la O Hernández, entre otros. Procedimiento en base a la averiguación previa 123/FECDO/2011, iniciada por la Procuraduría de Chiapas por los delitos de Delincuencia Organizada, Robo de Vehículos, Violación a la Ley Federal de Armas y Explosivos, Contra la Salud y Extorsión.

Inicia la cacería de policías 

Muchos policías se unieron al crimen organizado, mientras que otros solo recibían dádivas por información.

La Procuraduría de Justicia, en coordinación con los de la Secretaría de Seguridad Pública, ya tenían suficientes datos y determinaron el 24 de enero de 2012, proceder. Se capturaron al total de 22 agentes policiacos, tanto de la ministerial como de la uniformada y quedaban bajo investigación mandos medios y subdirectores.

El señalamiento fue de que “daban protección” al crimen organizado; nombres de los jefes de diversas áreas de la Policía Ministerial salieron a relucir, tales como Gustavo Torres, Carlos Alberto Alamilla y Arturo Sánchez. Se decía que “Santo Sapo” los había “puesto”; sin embargo, todos fueron absueltos.

Síguenos en Facebook: @elheraldodetab y en Twitter: @heraldodetab

Trece fueron los policías ministeriales involucrados por Santos Ramírez tras su captura, de nombres Alfonso Rueda Palma, Lenín Silvano Pérez, Nahún Domínguez Ramos, Jorge Alberto Olvera Márquez, alias ‘El Chilango’; Javier Alonso Hernández, alias ‘El Chancla’; Víctor Domínguez Hidalgo, Regino Bautista de la Cruz, Rafael Javier Jiménez López, Marco Antonio Morales Avalos, Joaquín Ruiz García, alias ‘El Mechudo’; Víctor Ángel Montalvo Bello y Carlos García Bautista. Y ser llevó también a preventivos de Cárdenas, como Ever Cadena Mollinedo, Felipe Burelo Burelo, Víctor Manuel Camacho López y Aníbal de Dios Jiménez; de Comalcalco, a Bertino Broca Lázaro; de Huimanguillo, Eleazar Mendoza Gómez, Luis Alfonso López Castañeda, Serio León Cruz, José Manuel Garduza Gerónimo, Candelario García García y Darwin Hernández Jiménez.

El descontrol se generó tras la caída de los jefes de la mafia. “Santo Sapo”, había dejado a segundos de abordo y estos perdieron el control. Atacaron el 9 de abril de 2012, las instalaciones de la Policía Federal de Caminos en Cárdenas; buscaban hacer estallar un auto, hecho que dispuso de mayor seguridad en la zona.

Durante el atentado fue aprehendido Octavio Trigo, de 35 años de edad, originario de Minatitlán y ex elementos del Ejército mexicano, quien se presume estuvo ligado con dos atentados más a la Policía Federal en Coatzacoalcos y Cosoleacaque, Veracruz, en esas mismas fechas.

Había caído otra de las cabezas del crimen organizado en La Chontalpa; un hombre de sobrenombre “El Cejas”, aprehendido a principios de Enero de 2012. Se le acusó de trasiego de drogas y secuestros. Fue jefe de un grupo de la policía judicial de Tabasco; duró 15 años en la corporación y acabó siendo mando del crimen organizado tras su renuncia en 2005.

En Campeche, daba otro duro golpe la Procuraduría de Justicia. El 10 d agosto de 2012, aprehenderían a Luis Armando Broca Pérez (a) “El Tomata”, o “El Garabatos” y/o “El Visco”, de quien se dijo que era uno de los segundos de a bordo de Santos Ramírez, pero también, bajo órdenes de Miguel Ángel Mora Melo (a) “El Comandante Fresa”, jefe de plaza en Cárdenas, Tabasco. Confesó secuestros, robo de autos, motos, levantones de personas y asesinatos, de hecho, confesó haber “cocinado” a varios; que los metían en tanques de 200 litros, le echaban ácido muriático y sosa cáustica, y que los huesos los enterraban.

El hombre confesó además que el 18 de mayo de 2011, por órdenes de “Santo Sapo”, participó en un tiroteo en un taller mecánico en Cárdenas, donde mataron a 10 personas. Que fueron ellos los que lanzaron granadas en la casa del ex procurador de Justicia del Tabasco, en ese entonces, Gustavo Rosario Torres, e hirieron a un vigilante; y que fueron ellos los que lanzaron granadas a las instalaciones de la Policía Federal en Cárdenas.

La Justicia los protegió y amparó

El 30 de enero de 2013, se daría a conocer un hecho que sorprendió a todos. La justicia federal amparó y protegió al total de 45 personas que fueron las capturadas en el enfrentamiento que sostuvieron con el Ejército Mexicano durante la captura de Santos Ramírez, y otras tantas durante procedimientos de ubicación ocurridos en noviembre de 2011 y enero de 2012. Familiares, amigos y ex policías ministeriales, salieron libres, excepto, “Santo Sapo”.

Se señaló que las liberaciones se dieron por la mala integración de los expedientes, y fue el Tribunal Colegiado del Décimo Circuito quien ordenó las liberaciones. Y pese al fallo, la Fiscalía de Justicia de Tabasco, al parecer no apeló a los autos de libertad.

En la lista estuvieron involucradas 38 personas, entre ellos 23 expolicías ministeriales; hechos que constaron en el amparo 334/2012; no hubo elementos para procesarlos.

Santos Ramírez Morales, permanece desde finales de diciembre del 2011 en una prisión federal. La entonces Subprocuraduría de Investigaciones en Delincuencia Organizada (SIEDO) fue sacado por elementos de la Procuraduría General de Justicia de Tabasco, del Hospital Gustavo A. Rovirosa Pérez a eso de las 13:15 horas y custodiados por fuerzas militares, se le llevó al Aeropuerto Internacional , Carlos Roviosa se le traslado a la ciudad de México para quedar en custodia de la Procuraduría General de la República a través de la SIEDO.

Se le acusó de más de 40 crímenes, muchos de estos sádicos, y un centenar de desaparecidos, secuestros, en lo que fue su reinado por casi tres años; hoy, minusválido por el impacto de bala que recibió en la espalda durante su captura, permanece recluido en el penal de máxima seguridad en Puente Grande, Jalisco., aguardando sentencias.