El 3 de septiembre de 2020 la sociedad tabasqueña se enteraba de hechos violentos que ocurrieron en Centla, Tabasco, que cobraron la vida de un sujeto apodado “El Yordi”.
Lee más: ¡Brutal! Camioneta embiste a otra en una vulcanizadora en Villahermosa
Los pobladores de la ranchería El Carmen 2da. Sección, perteneciente a Villa Ignacio de Allende, lo señalaban como presunto asesino de un campesino, la muerte habría ocurrido el fin de semana anterior al linchamiento.
La víctima, un hombre de 63 años, perdió la vida por los golpes que le dio el muchacho hasta destrozarle el cráneo a garrotazos, por una disputa de alcohol.
¿Cómo calificó la comunidad el proceder de la FGE?
Pese a que había denuncias contra el joven, la Fiscalía General del Estado (FGE) no hacía nada para proceder, según los habitantes de la comunidad.
La inoperancia de las fuerzas del orden (por lo menos así lo veían los vecinos) fue alimentando el enojo, desde hacía tiempo que la sentencia del muchacho estaba dictada, no por las autoridades sino por aquellos que se sentían agraviados.
Un día miércoles la gente decidió ir tras él, la cacería había comenzando, para mala suerte de “El Yordi” fue ubicado. La enardecida turba se preparó para darle su escarmiento.
¿Por qué la comunidad se hizo justicia por su propia mano?
Entre los comentarios estaban que había despachado al otro mundo por lo menos a tres personas y se dedicaba asaltar a ciudadanos de otras comunidades.
Todo lo anterior fue alimentando más el sentimiento de impotencia de los ciudadanos. La información que salió horas después del trágico suceso fue que al tenerlo, los pobladores lo amarraron.
Después, la muchedumbre comenzó a desquitarse de aquel, le ocasionaron dolor primero a garrotazos, una y otra vez, enseguida vinieron los machetazos hasta que el individuo perdió la vida. Así terminó la vida de este joven.