Este 12 de julio se celebra en México el Día del Abogado, y en Tabasco ha habido muchos de gran prestigio y queridos por el pueblo, uno de ellos fue Gregorio Arias Pérez, conocido también como Goyo Arias, quien fue alcalde de Comalcalco, del que sólo las balas pudieron detener su fuerza política.
La noche del martes 11 de octubre de 2022 fue ultimado de cinco balazos el abogado y expresidente municipal de Comalcalco, Tabasco, los sicarios esperaron a que saliera de su despacho para ejecutarlo. Su deceso desencadenó una movilización policiaca para dar con los matones.
Lee más: Pintas mortales: Cuando los jóvenes evaden las aulas y acaban sin vida en Tabasco
Ahí en el tibio asfalto, huella de un día de calor, yacía el cuerpo del hombre notable en la sociedad comalcalquense. Años antes de su trágico deceso, el exedil comenzó su vida pública en 1986, ese año fue el inicio de su carrera política como coordinador de la feria de su terruño.
Sus inicios
En ese mismo año es nombrado subdirector en el ayuntamiento, cargo que desempeñó hasta 1987 y después fue nombrado como director de Reglamentos, concluyendo la encomienda en 1988. Era obvio que Gregorio estaba ascendiendo en su carrera política. La década de los 90 vio al político quedar en el puesto de director de averiguaciones previas en la Procuraduría General De Justicia del Estado, entre 1995 y 1997.
Recibe a partir de ahora las noticias más importantes directo a tu WhatsApp
Después fue Director General de Prevención y Readaptación Social del Estado del Secretariado Ejecutivo del Sistema Estatal de Seguridad Pública, de 2001 al 2003. Las encomiendas continuaron y el 1998 llegó al área regional en el Palacio de Gobierno. El también maestro en Derecho fue Presidente Municipal de 2004 a 2006, y volvió a competir para el cargo en 2021.
La tragedia seguía a Gregorio Arias
Parece que a Goyo Arias lo seguía la tragedia, 11 años antes de su asesinato, su hijo de apenas 17 años, Santiago “N” fue asesinado luego de ser secuestrado. Un devastado hombre habló a los medios de comunicación, entre sus palabras llenas de dolor dijo que habían sido 92 días de angustia; se refirió a su muchacho como un buen hijo que estudiaba para pastor. Afirmó que su muerte fue porque conocía a su secuestrador y efectivamente, el adolescente conocía al plagiario, era alguien cercano a la familia de nombre Agustín “N”, un ex petrolero.
Sus cómplices fueron José Antonio “N”, El Goyo; Ángel Adolfo “N”, El Fito y Juan Pablo “N”, La Juanpa, de 18, 20 y 19 años, respectivamente. Con el corazón desgarrado, contó que al joven lo tuvieron 14 días en una casa de seguridad, y pese a pagar el rescate lo ultimaron, le vendaron los ojos y le pegaron un tiro.
Los 1.5 millones de pesos que exigieron los secuestradores no fueron suficientes, pero entre el dolor de Gregorio le quedó el consuelo que se salvaron muchas vidas, ya que durante la búsqueda, las autoridades dieron con los delincuentes y una lista con nombres de posibles personas que serían secuestradas.
Fatídico 11 de octubre
Pese al trago amargo Gregorio Arias siguió con su vida, hasta el 11 de octubre de 2022 cuando dos personas en moto le dispararon. Las detonaciones fueron escuchadas por los vecinos, quienes se dirigieron a donde se encontraba un cuerpo, grande fue su sorpresa al darse cuenta que era de alguien conocido.
En la esquina formada por las calle Aquiles Juárez y el bulevar Leandro Rovirosa Wade, quedó el notable hombre. Mientras las autoridades hacían las pesquisas, en las redes sociales comenzaron a llegar las condolencias a la familia, en reconocimiento a un político orgullo de Comalcalco.
