Huimanguillo, Tab.- El que asumiera la dirigencia sindical de obreros adheridos a la Confederación de Trabajadores Mexicanos (CTM), en la comunidad Macayo y Naranjo de este municipio, ante la ejecución de Salatiel Olán Martínez perpetrada a principios de este año, acabó ayer a la media noche muerto a balazos, luego de ser citado por posibles conocidos, a una “reunión” urgente cerca de su domicilio.
Las muertes de los dirigentes sindicales, hacer ver, el serio interés que existe por estar al mando del grupo de agremiados, o en su defecto, la negativa de los que han estado a cargo de involucrarse en posibles actividades ilícitas; dos son los asesinatos de los que aparentemente, no hay un móvil especifico.
Anoche, el líder sindical, Julián "N" de 50 años de edad, avecindado en la comunidad Macayo y Naranjo, y quien desde enero se hizo cargo de sus agremiados, ante la ejecución de su compañero, Salatiel "N", a decir de su hija Aracely "N", recibió una llamada telefónica en donde le indicaban se trasladara a la gasolinera.
Se informó a la policía, que él, abordó su auto y enfiló hacia la cita, pero no avanzó mucho, pues, aparentemente, y a decir de vecinos, vieron una riña entre automovilistas y era él, con dos sujetos que viajaban en un auto atos color azul.
Según, él, los enfrentó y tras las discusiones, vinieron los golpes, pero uno de los desconocidos sacó un arma y comenzó a disparar. Dicen que don Julián, corrió al auto y a toda marcha buscó escapar, y logró así llegar hasta casa de su hermana Ninfa "N".
Su hermana, acusó que su consanguíneo, entró corriendo a su vivienda, perseguido por desconocidos que le venían disparando; que del patio, los tipos abordaron el coche de su hermano y huyeron junto con otros que venían en un coche azul.
Cuando fue a ver a su hermano, esta estaba tirado en el piso, en el área de la cocina; presentaba balazos en el abdomen, y lamentablemente, había muerto.
OTRA VEZ, EN MACAYO Y NARANJO
Fue el pasado 21 de enero de este mismo año, en que desconocidos determinaron la ejecución del que fuera el líder sindical de la comunidad Macayo y Naranjo, Salatiel Olán Martínez; crimen del que la autoridad de justicia no ha podido esclarecer.
Salatiel Olán, de 51 años de edad, era el dirigente de obreros en la comunidad antes descrita; esa tarde, salía pues de la zona en busca de llegar a su domicilio cuando a la altura de la zona conocida como “El Puente”, donde radicaba, paró su auto atos color rojo ; se aparcó debidamente y posiblemente dialogó con alguien; luego, fue asesinado con disparos en la cabeza.