Ejecutado en Tamulté

Sujetos armados irrumpieron en una vivienda para ultimar a balazos a un hombre

Héctor Andrés Trinidad

  · viernes 12 de abril de 2019

El hoy occiso era conocido bajo el mote "El Cucaracho". /Javier Chávez

Un hombre, presuntamente vinculado a actos ilícitos, fue ejecutado a balazos en el interior de su domicilio, cuando precisamente comía sus sagrados alimentos; un niño, su sobrino, de 7 años de edad, que le acompañaba, recibió un disparo en la cabeza, hecho por el que dan, pocas posibilidades que sobreviva; la mujer del difunto, también resultó lesionada en uno de sus brazos, pero se va a recuperar.

El crimen de quien fue identificado por el mote de “El Cucaracho” de nombre, Juan "N" se perpetró a eso de las cuatro y media de la tarde de ayer, en el interior de la casa ubicada en la calle Vicente Guerrero, perteneciente a la colonia Tamulté de las Barrancas.

Juan Alberto, comía acompañado de su sobrino Jesús "N" de apenas 7 años de edad, junto con la joven Ana Cristina, cuando aparecieron dos sujetos armados que sin más, abrieron fuego contra ellos.

Los dos tipos, de los que se acusó, eran jóvenes, delgados, altos, hicieron una serie de disparos con pistolas de alto calibre, y tras disparar sin cesar, corrieron hacia la calle Ejido, donde a la altura de la escuela Lizardi, fueron apoyados por motociclistas y así, emprendieron la huida.

En la casa, color rosa, quedó sin vida, “El Cucaracho”, y malherida su pareja, además del pequeño; los padres del menor, llegaron en esos momentos y sin más, levantaron al niño y en una motocicleta lo trasladaron al hospital del Niño en donde fue llevado inmediatamente a cuidados intensivos.

En el lugar, quedaría herida del brazo la joven Ana Cristina, quien fue auxiliada por personal paramédico de cruz roja, que además, supervisó el estado de crisis nerviosa del joven de 15 años de edad, Andrés Isidro Burelo, quien fue mudo testigo del asesinato de sus parientes.

De acuerdo a datos, los vecinos comentaron de que a Juan, ya lo andaban buscando; hombres que anduvieron preguntando dos días antes de su muerte, dónde vivía.