Ratifican sentencia de 50 años de prisión contra Martín Alberto Medina Sonda, por su responsabilidad penal en el delito de feminicidio agravado por el asesinato de su ex esposa, Ema Gabriela Medina Canto, el pasado 27 de marzo.
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Durante la sesión efectuada el día de ayer lunes, 3 de mayo, magistrados de la Segunda Sala Colegiada del Sistema de Justicia Penal Acusatorio del Poder Judicial del Estado de Yucatán emitieron su resolutivo declarando inoperante e infundado el recurso de apelación que había interpuesto la defensa del empresario.
La ex esposa en vida, había denunciado en reiteradas ocasiones la violencia de la cual había sido víctima por parte de Molina Canto
En 2012, Medina Sonda arrebató a sus tres menores hijos a su ex esposa Ema Gabriela, a quien incluso, hizo uso de sus influencias para meterla en prisión, denunció su madre Ligia Canto.
Ante ello, la familia de Ema Gabriela inició una serie de protestas donde ventilaron los negocios turbios que hacía Molina Canto con los ex funcionarios granieristas.
PLANEÓ DESDE LA CÁRCEL EL HOMICIDIO
La muerte de Ema Gabriela fue perpetrada el 27 de marzo del 2017, tras recibir 11 puñaladas a la puerta de su casa en el fraccionamiento San Luis, Yucatán.
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Los hechos fueron realizados por dos jóvenes tabasqueños que de acuerdo a las declaraciones dadas tras su detención, recibieron 60 mil pesos por el ‘trabajo’, siendo reclutados por Freddy “N”, apodado “El Cachorro”, quien también recibirá una pena de 35 años de cárcel por ser coautor intelectual del crimen.
PUGNA CONDENA DE 12 AÑOS POR LAVADO DE DINERO
Cabe recordar que el ex socio de José Manuel Sáiz Pineda, ex secretario de Planeación y Finanzas del gobierno de Andrés Granier Melo, quien también pugna actualmente en el CRESET una condena por 12 años por el delito de lavado de dinero.
Fue detenido en octubre del 2014, en Cancún, Quintana Roo, tras haberle imputado en ese entonces, la procedencia ilícita de 8 millones de pesos en efectivo que autoridades federales incautaron dentro de una avioneta que había aterrizado en el aeropuerto de Mérida, Yucatán.
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Las personas que viajaban en la aeronave, señalaron que se trataba de dinero que utilizarían para la compra de tierras en ese estado, y que provenía del estado de Tabasco, y Medina Sonda los reclamó como suyos.