El pasado viernes 28 de enero de 2022 ocurrió una tragedia que conmovió a la sociedad tabasqueña; un individuo abrió fuego contra su esposa luego de sostener una acalorada discusión con ella, y posteriormente se suicidó de un disparo en la sien.
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Vecinos de la pareja, cuyo domicilio se encontraba en la ranchería Amado Gómez de Cunduacán, dieron cuenta de los hechos y pusieron a las autoridades al tanto de los mismos. Él murió al momento, y ella al llegar al hospital.
Sucesos similares ya han tenido lugar anteriormente en la entidad; dos de los que cimbraron a la sociedad ocurrieron en Jalpa de Méndez en 2016 y 2020, en donde individuos acabaron con la vida de sus hijos y luego se sucidaron.
Acabó con su familia
Uno de los hechos sangrientos ocurrió en el Poblado Nicolás Méndez del municipio de Jalpa de Méndez, cuando en diciembre de 2016, un hombre de nombre Ramón “N” golpeó con un martillo hasta la muerte a sus tres hijos, identificados como Ángel, Nicole y Magaly; acto seguido, acuchilló en la cabeza a su esposa Patricia “N”.
Después de cometer el triplle filicidio y de asesinar a su cónyuge, Ramón “N”, quien era originario del municipio de Cunduacán y trabajaba en una empresa cementera, se quitó la vida ahorcándose.
Mató a sus hijos y se suicidó
Una desgracia similar ocurrió en julio de 2020, también en Jalpa de Méndez. Por motivos que se desconocían, Francisco “N” asesinó a sus dos pequeños hijos de 5 y 8 años de edad, y después se suicidó. Hechos ocurridos en la comunidad de El Santuario, primera sección de dicho municipio.
Pero para distraer a las autoridades antes de cometer el reprobable acto, Francisco incendió su auto, el cual estaba en el patio de su casa; al dar cuenta del fuego en el lugar, los vecinos informaron a los elementos de Protección Civil municipal, quienes acudieron a sofocarlo.
Una vez controlado, la esposa del presunto responsable, de oficio enfermera, arribó al domicilio, encontrándose con una escena dantesca: el cadáver de su esposo, Francisco “N”, yacía colgado con una soga del techo del hogar.
Mientras que los dos pequeños, identificados como Yenedit y Emmanuel, también estaban colgados al lado del cuerpo de su padre; todo indicaba que él los había ahorcado.
Aunque se desconocieron los motivos que orillaron al individuo a tomar la fatal determinación, investigaciones señalaban que tenía problemas con su esposa porque la maltrataba, motivo por el cual ella lo habría denunciado por violencia familiar.