El calvario para la familia de Juany Amairany, quien fue hallada sin vida presuntamente en una propiedad de sus suegros, no ha terminado. Ahora, según el testimonio de una persona cercana a la víctima, parientes de Saúl, expareja y presunto asesino de la joven, lanzando tiros al aire los amenazaron para que dejen las cosas a como están, y dejen de pedir justicia por este crimen.
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Así lo externó a El Heraldo de Tabasco una fuente cercana a la familia de la víctima, quien aseguró que además, que los padres del presunto homicida habrían sido liberados de las manos de la Guardia Nacional por un grupo de personas fuertemente armadas, quienes se los llevaron a su domicilio ubicado en Gaytán.
A decir del declarante, los empistolados supuestamente quedaron resguardando la zona, impidiendo que la policía pueda acercarse y amenazando con matar a quien se atreva a hacerlo; en tanto, los padres de Saúl “N” estarían recogiendo algunas cosas para poder darse a la fuga; sin embargo, vecinos, amistades y conocidos de la hoy occisa se mantienen vigilantes en los alrededores del lugar para impedir que logren su cometido.
El cuerpo de la joven, quien se encontraba desaparecida desde el pasado 17 de enero en Huimanguillo, fue localizado en un rancho propiedad de sus ex suegros. El hallazgo se dio horas después de que los padres de Saul “N” fueran detenidos por pobladores para exigirles saber el paradero de su hijo, ya que presuntamente en la vivienda de él, había sido encontrada la ropa que portaba Juany Amairany desde el momento de su desaparición, misma que tenía rastros de sangre, y por lo cual el hombre era el principal sospechoso de su desaparición.
Ante esto, el padre del individuo habría confesado que su hijo le había pedido ayuda para enterrar el cuerpo de la muchacha, con quien llevaba cuatro meses separado, pero ellos se negaron a ayudarlo; después de ello, le perdieron el rastro
Un familiar de la víctima reveló que después de separarse, Amairany recibió varias amenazas de muerte vía WhatsApp por parte de Saúl, quien le decía que si ella y sus hijos no regresaban con él, los mataría. Y pese a que la hoy occisa acudió a realizar la demanda correspondiente, las autoridades hicieron caso omiso.