Ciudad del Vaticano.- Condena “a medias” contra un prelado acusado de abusos sexuales a daños de menores. El arzobispo de Guam, Anthony Sablan Apuron, de 73 años, fue declarado culpable en primera instancia de este grave delito, al cabo del proceso al que fue sometido por el Tribunal Apostolico de la Congregacion para la Doctrina de la Fe. Sin embargo, la sentencia prevé solamente la prohibición al imputado de residir en la isla del Pacifico, si bien podrá seguir vistiendo la sotana de sacerdote y de obispo y celebrar misa.

La decisión del Papa Francisco de no reducir al estado laica, debido probablemente al delicado estado de salud de Auron, ya provoco algunos malhumores y criticas, según las cuales no se estaría cumpliendo con la transparencia que muchas veces Bergoglio ha prometido para hacer publica la firmeza al momento de juzgar a los sacerdotes pederastas.

Una decisión que se agrega a otras precedentes y poco severas sentencias sobre la pedofilia clerical. Por ejemplo, es el caso de la dictadaminada contra el sacerdote chileno Fernando Karadima, culpable de abusos y a quien también se evito reducir al estado laico.

Karadima es el sacerdote, cuyos delitos habrían sido cubiertos por el obispo chileno Juan Barros, que fue defendido por el mismo pontifice argentino, el cual sucesivamente, dado el clamor y las criticas en su contra, decidió ordenar una investigación mas a fondo sobre este caso.

Respecto al prelado de la pequeña isla del Océano Pacífico, cuya soberanía pertenece a Estados Unidos, cabe señalar que en junio de 2016, cuando el Vaticano recibió las primeras acusaciones, el arzobispo Apuron decidió autosuspenderse, proclamandse inocente. Asimismo, la sentencia en primer grado del tribunal vaticano podría en teoria ser sometida a apelacion.

También hay que decir que en un año en Guam se han registrado mas de cien denuncias de abusos sexuales contra menores dentro de la Iglesia Católica. Y entre quienes han acusado al arzobispo Apuron de haberlos violado cuando era párroco están varios ex-monaguillos e inclusive un sobrino del prelado. (fin)