Tras dos años de discusión, el Senado de la República aprobó en los general y particular la reforma en materia de subcontratación, conocido como outsourcing. Fueron 110 votos a favor, uno en contra y una abstención, por la que se aprobó el proyecto de decreto, y ahora la minuta pasará al Ejecutivo.
La modificación permitirá la subcontratación en caso de servicios y obras especializadas distintas al objeto social o actividad preponderante de la empresa que se beneficie de éstos.
Dentro de los cambios aprobados se establece la responsabilidad solidaria para las prestaciones laborales, de esta manera los empleados en esta modalidad podrán exigir al patrón seguridad social en beneficio de mejores salarios, acceso a la vivienda y servicios de salud.
También se establece que el monto de la participación de utilidades será como máximo tres meses de salario o el promedio de participación recibida de los últimos tres años, según beneficie al trabajador.
Condiciona a las compañías a un permiso otorgado por la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, que tendrá que ser renovado cada tres años, ya que de operar en la ilegalidad se prevén multas que se ubican entre dos mil a 50 mil veces la Unidad de Medida y Actualización (UMA), es decir, entre 179 mil y cuatro millones 481 mil pesos.
Cabe señalar que el PRD y PAN mencionaron que buscarán que las empresas privadas puedan tener seis meses para la implementación de esta nueva disposición como el gobierno federal en enero de 2022.