Entre 2010 y 2021 se abrieron 94 investigaciones por el delito de robo del patrimonio cultural histórico, arqueológico y paleontológico, pero sólo en ocho casos se ha logrado la recuperación o restitución de los bienes robados, de acuerdo con datos de la Fiscalía General de la República obtenidos por Transparencia.
Es decir, sólo hay un índice de efectividad de 8.5 por ciento para recobrar los objetos que son patrimonio cultural de la nación, y que su robo se contempla como delito en la Ley Federal Monumentos Zonas Arqueológicos, Artísticos Históricos en los artículos 28 y 36; y con penas de 12 años de prisión y 5 mil veces la Unidad de Medida y Actualización.
El tráfico de bienes culturales es una actividad de bajo riesgo y alta rentabilidad para los delincuentes vinculados al crimenorganizado, que afecta a todos los países como origen, tránsito o destino de dichas piezas, de acuerdo con la Interpol.
Este es un tema en el que ha manifestado su interés el presidente Andrés Manuel López Obrador, y dentro de las tareas que les ha encomendado a la Guardia Nacional (GN) está la recuperación de los objetos.
A pesar de esto, durante su gobierno la FGR sólo ha abierto 13 carpetas de investigación, mientras que en el sexenio de Enrique Peña Nieto fueron 52, y en los últimos tres años del expresidente Felipe Calderón se registraron 29 averiguaciones previas.
“Es muy lamentable que el gobierno de Francia no haya legislado sobre esto, como sí sucede en el caso de Italia y debería de suceder en todo el mundo, el que no se permitan esas subastas, que piezas de arte que fueron sustraídas, que fueron robadas, saqueadas de otros países donde florecieron grandes civilizaciones, como es el caso de todo el arte que se han robado de México, que está en los museos y en las colecciones privadas de países del extranjero”, dijo López Obrador el pasado 7 de febrero durante la conferencia mañanera.
Un ejemplo, es que en algunas subastas como la de Francia el valor de los preciados bienes patrimoniales y culturales fluctúan en miles de euros.
Los que no tuvieron este destino son las 103 piezas aseguradas por la GN (76, en 2020 y sólo 27, en 2021), según datos de sus informes anuales de actividades.
Aunque no especificaron qué tipo de objetos son los recuperados.
CATÁLOGO DE LO ROBADO
La noche del 27 de diciembre de 2019 dos sujetos ingresaron al Museo Fuerte de Guadalupe, en Puebla. Tras amagar al vigilante robaron tres sables y 36 monedas y medallas históricas, siendo uno de los casos registrados por las autoridades.
El inventario de las denuncias del INAH muestra el robo de 14 hachas, una escultura de Tláloc y un cuchillo en la Ciudad de México; el robo de 523 piezas arqueológicas en Morelos, todos en 2015.
En 2016 hurtaron seis monumentos arqueológicos de obsidiana en Nayarit y dos estelas en Quintana Roo.
En la CdMx durante 2018 sustrajeron una vasija y un códice maya de 16 piezas; también un monumento arqueológico tallado en piedra en forma de serpiente emplumada en Oaxaca. A esto se suma el robo de distintos bienes arqueológicos en Jalisco, Puebla, Guanajuato, Estado de México, Durango y Morelos entre 2019 y 2020, solo por mencionar algunos. Al año siguiente robaron 2 escudos en Puebla.
A su vez, a través de la aplicación móvil ID-Art, de la Interpol que ayuda a descubrir bienes culturales robados, reducir el tráfico ilícito y aumentar la probabilidad de recuperar los objetos sustraídos —que contiene más de 52 mil objetos de arte de 134 países miembros— México aparece en la lista, con 389 piezas.
La base de datos muestra manuscritos, mapas prehispánicos, escudos de armas, esculturas religiosas, pinturas, esculturas de piedra, estatuas, orfebrería de oro y plata, puntas de flecha, objetos arqueológicos de distintas culturas prehispánicas y más.
DEVOLUCIÓN
Una de las mayores recuperaciones de piezas arqueológicas por parte del Gobierno mexicano se dio hace un año. El 9 de marzo de 2021, 280 piezas arqueológicas fueron repatriadas a México desde Estados Unidos.
“Las piezas corresponden a dos lotes, el primero decomisado por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos de América (ICE/HSI) en 2012, el cual posteriormente coordinó la revisión de los bienes culturales y su identificación con el Gobierno de México a través del INAH”, informó la Secretaría de Relaciones Exteriores en esa ocasión.
Y en otro caso, aunque no tuvo que ver con robos o decomisos, el 20 de febrero pasado la Secretaría de Relaciones Exteriores informó que dos ciudadanos de Países Bajos restituyeron voluntariamente a nuestro país 17 piezas arqueológicas.
“Previo a su restitución, las piezas elaboradas en barro fueron dictaminadas por peritos del Instituto Nacional de Antropología e Historia, quienes determinaron que trece de ellas son de estilo huasteco, realizadas en la Costa del Golfo de México durante el periodo Posclásico mesoamericano (900-1521 d. C.); dos son de estilo mexica, hechas en el Altiplano central mexicano en el periodo Posclásico Tardío mesoamericano (1200-1521 d. C.); una fue forjada en la costa del golfo de México durante el periodo Clásico mesoamericano (400-750 d. C”, informó la SRE
