Desde 2018 a la fecha se tiene un registro de por lo menos 953 policías asesinados en México, sostuvo la organización Causa en Común, al tiempo de señalar que en lo que va del 2020 se tiene un registro de 55 elementos abatidos.
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En este sentido, David Blanc investigador de Causa en Común indicó que la tasa promedio de asesinatos en México es de 31.1 por cada 100 mil habitantes, mientras que para los policías es de al menos 115.8 por cada 100 mil oficiales.
David Blanc detalló que el conteo que realizan de policías muertos en todo el país está basado en la información que se reporta en medios locales y nacionales, así com de una red de más de 20 periodistas.
En el informe presentado por esta organización, se dio cuenta que hay 482 policías municipales asesinados, así como 413 elementos estatales y 58 federales.
Hay que decir que esta relación también tiene que ver y está en conjunto con los estados de fuerza, donde vemos que hay un mayor número de policías municipales, seguido por estatales y federales
Abundó que en el 2018, se registraron al menos 421 elementos policiacos asesinados, mientras que en el 2019 se obtuvo un registro de 446 y en lo que va del 2020 se tiene un conteo de 54.
María Elena Morera Mitre, directora de Causa en Común refirió que “ser policía en México implica un riesgo de ser asesinado casi cuatro veces mayor en comparación con un ciudadano común, “lo que deja un mensaje de que matar un policía es fácil y no conlleva ninguna consecuencia”.
Morera Mitre manifestó Causa en Común presenta como propuestas el que es urgente que se les eleve el salario de los policías, ya que en su mayoría ganan menos de 10 mil pesos al mes, además de dotar de mayor equipamiento y armamento suficiente para sus funciones, así como capacitación.
En la propuesta, también se establece que se debe de cumplir con el pago de las indemnizaciones a los familiares de los policías que han caído en el cumplimiento de su deber y definir un criterio de régimen de compensaciones.
En este sentido, la activista social demandó a las procuradurías y fiscalías estatales a que cuando se tenga información de un policía asesinado, este debe ser investigado sin dilación alguna y castigar a los culpables, ya que “si queremos que los policías no cuiden, debemos de empezar por cuidarlos”.