Tras estimar que de los 80 mil burócratas que hay en el estado, unos 42 mil pertenecen a la Secretaría de Educación, el titular de esa dependencia, Guillermo Narváez Osorio, señaló que hasta el momento han encontrado deudas con proveedores de hasta 26 millones de pesos, así como demandas laborales por 58 millones de pesos, entre otros atrasos con personal de contrato y entrega de becas.

Indicó que algunas partidas para la dependencia fueron desviadas para cubrir otras, situación que dejó “cojo” al presupuesto.

El funcionario estatal consideró que es imposible cubrir una irregularidad con otra, por lo que dijo que el responsable del déficit de la Secretaría de Educación es el “desorden administrativo” que dejaron anteriores gestiones.

Por ello, comentó que se requiere de una auditoría con un despacho externo para identificar irregularidades en la dependencia a su cargo como la existencia aviadores, claves mal asignadas, entre otras.

Asimismo, pidió paciencia a los maestros que fueron cesados por la pasada administración, en tanto se define cómo resuelven esta situación los diputados y senadores referente a la nueva ley.