En críticas condiciones se encuentran los habitantes de las rancherías Ixtacomitán, debido a la unión que han tenido los ríos Tepate y Pichucalco, los cuales han desatado nuevamente las inundaciones de las viviendas situadas en las zonas.
Los lugareños señalan estar desesperados, ya que cuando comenzaban a tener un respiro, se vieron afectados otra vez por la creciente.
Detallan que los ranchos se encuentran totalmente inundados.
En la zona de Amatal, los caminos presentan vados con niveles de consideración, sin embargo el tránsito vehicular continúa habilitado.
El Guinal, en su cuarta sección, los terrenos se encuentran severamente afectados.
Vecinos acusan que en días recientes el agua comenzó a rebasar los niveles de la carretera y muchas de las viviendas se comenzaron a inundar manteniéndolo en la zozobra de cuando mejorarán las condiciones, debido a los pronósiticos anunciados por las autoridades en cuanto a los incrementos de los ríos.
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