A pesar del acuerdo firmado entre el gobierno del estado de Tabasco y la Comisión Federal de Electricidad (CFE) a principios de este año, por medio del cual se terminaba la resistencia civil y se otorgaba el borrón y cuenta nueva a los usuarios domésticos del estado, la deuda de los tabasqueños por consumo de energía eléctrica ha crecido en 256 millones de pesos.
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Todo parece indicar que la promesa del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador de terminar con la llamada resistencia civil en su estado natal no se cumplirá, y los acuerdos firmados entre el gobierno del estado y la CFE correrán la misma suerte de los convenios firmados en las anteriores administraciones que no resolvieron el problema.
El 2 de febrero, la CFE y el gobierno del estado firmaron un acuerdo para condonar la deuda que mantenían los usuarios del servicio doméstico en la entidad. A cambio de ello, la administración estatal se comprometía a un pago de 2 mil 300 millones de pesos, en abonos mensuales.
A nueve meses de la firma del acuerdo, el gobierno del estado ha transferido a la CFE poco más de 155 millones de pesos, mientras que la deuda de los tabasqueños con la empresa productiva sigue creciendo, y no sólo la de los usuarios domésticos.
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Hasta la primera semana del mes de noviembre del año en curso, la deuda total de los tabasqueños con la empresa de luz llega a los 15 mil 472 millones de pesos, misma que se integra por 13 mil 273 millones de pesos de los usuarios con tarifa doméstica, mil 652 millones de pesos correspondientes a los de tarifa comercial y el resto corresponde a los usuarios de tarifa industrial, de servicios y agrícolas.
Durante el mes de marzo, la CFE señalaba que el adeudo de los tabasqueños ascendía a los 15 mil 216 millones de pesos. Por lo que en el tiempo que lleva de vigencia el acuerdo de condonación, el pasivo creció en 256 millones de pesos.
Es decir, no sólo no se dio la eliminación de la deuda histórica, iniciada a mediados del siglo pasado cuando los seguidores del ahora presidente de la república acordaron no pagar el consumo de energía eléctrica, sino que ésta sigue creciendo.
El problema de morosidad con la CFE no es exclusivo de la ciudadanía, sino que los Ayuntamientos del estado ya acumulan una deuda por más de 555 millones de pesos, lo que ha llevado al gobierno del estado a instalar una mesa de diálogo en la que participan los presidentes municipales entrantes y representantes de la empresa pública de suministro de electricidad.
El asunto se está volviendo un cuento de nunca acabar, mientras que la CFE pide el pago de consumo bajo la amenaza de corte del suministro, que en miles de los casos se cumple.