Los parques y centros de esparcimiento son una opción para las personas que buscan un lugar para escapar de las altas temperaturas.
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Un claro ejemplo es el parque Tomás Garrido Canabal cuyo principal atractivo son la fuente y cascada que los niños convirtieron ya en su balneario favorito.
Brincan, bailan, ríen, gritan y juegan y se bañan con el chorro que brota de la fuente bajo la mirada de sus padres, tíos o abuelos.
O bien se dan un buen chapuzón en la "piscina" del agua que cae de la pequeña cascada proveniente de una corriente que enlaza con esta.
Además de representar para ellos un sano esparcimiento, mitigan el insoportable calor de hasta 39 grados que impera en la capital tabasqueña.
Sin dejar de lado que disfrutan además de alguna paleta o helado, además de frituras y golosinas como parte del "picnic" dominical.
Los adultos, por su parte, descansan en las bancas o algún espacio debajo de la sombra de los árboles aprovechando el correr del aire fresco.
Aprovechan también para revisar sus redes sociales y chatear un poco mientras observan a los pequeños divertirse y en tanto llega la hora de tomar las cosas y emprender el regreso a casa.