En Tabasco se actúa en base a ocurrencias e intereses, no para dar soluciones a problemas urgentes, en corto, mediano y largo plazo, sostuvo el expresidente del Colegio de Abogados Tabasqueños, Sergio Antonio Reyes Ramos al referirse a la cancelación del Centro de Control, Comando, Comunicación, Cómputo y Calidad (C5) por parte del gobierno del estado.

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Por lo que en lugar de andar cancelando obras y anunciando otras, hay que adecuar el Plan Estatal de Desarrollo para determinar cuáles son las prioridades ante la nueva normalidad por el COVID-19.

“Es evidente que no hay una política pública de prioridades, incluso, ni siquiera se han promovido o analizado las reformas necesarias para adecuar el plan estatal de desarrollo a la pandemia y a la nueva normalidad”, abundó.

El reconocido abogado, dijo que a estas alturas y obedeciendo al artículo 76 de la Constitución local, ya se debió convocar, al menos en línea, al Sistema Estatal de Planeación Democrática, para analizar y proponer las adecuaciones necesarias al PLED.

De tal forma que no se ande dando “bandazos” en las obras publicas por encima de políticas de prevención y mitigación del covid 19 o la paradoja de que por falta de planeación y logística las oficinas públicas y del Poder Judicial reanuden actividades en pleno pico de contagios.

Y de paso añadió- tampoco hay una política pública de comunicación social efectiva, tampoco el órgano de transparencia funciona, de tal modo que la sociedad esta desinformada, ante decisiones opacas, onerosas y contraproducentes.

Dijo que ante los altos índices delictivos se debió analizar qué tan prioritaria resulta una obra orientada al rubro de la seguridad pública en tiempos de la pandemia de coronavirus.