El 58 Aniversario del popular Mercado Público “José María Pino Suárez” y del Día del Locatario, no estará amenizado por la inmortal canción de Pepe del Rivero: “Mercado de Villahermosa”, ya que no habrá festejo ante la letal pandemia de Covid-19, que ha causado la muerte de varios locatarios.
Las familias tabasqueñas que asisten a ese importante centro de abasto que ocupa nuevas instalaciones no escucharán la contagiosa y rítmica canción que invitan a bailar: “Mercado de Villahermosa, con olor a pan de huevo, a queso y requesón, tamalito de maíz nuevo, longaniza y chicharrón. Eres rey del chanchamito, la pigua y el camarón, también el pescado frito, Mercado de Villahermosa, te dedico mi pregón. Chivirivito, traigo caimito, la dulce guaya, piña sabrosa, el marañón y la pitahaya, el tamalito y la pomarrosa. Chivirivito, dulce de coco, el chocolate dulce y amargo, tu boca hermosa panal de rosa, sabe a conserva de Torno Largo”.
El mercado fue inaugurado en 1962 por el entonces gobernador Carlos A. Madrazo. El lugar está ubicado entre la avenida José María Pino Suarez y Constitución, entre la calle Amado Nervo y Bastar Zozaya.
Este inmueble hasta antes de ser completamente destruido para construir unas nuevas instalaciones, era obsoleto, insalubre, con instalaciones de gas y electricidad que representaban un peligro para los clientes y locatarios.
En el año de 1999, se llevó a cabo una reparación y embellecimiento arquitectónico integral. Para el año 2007 derivado de los estragos de las inundaciones atípicas, se tuvo que rehabilitar y reconstruir gran parte del inmueble.
Cinco años después, en 2012, se le vuelve a dar mantenimiento, ahora por los daños causados por la inundación del 23 de octubre del mismo año y cuya inversión ascendió, de acuerdo a datos proporcionados por la coordinación de mercados de centro, a 6 millones 200 mil pesos.