La emergencia sanitaria decretada en territorio nacional a causa de la pandemia mundial por el coronavirus (Covid-19) ha paralizado la economía. Miles de empresas se han visto afectadas en mayor o menor medida por esta causa, al tener que suspender parcial o totalmente sus actividades al considerarse como “no esenciales”, y en los casos más extremos, se han visto obligados a despedir a su personal, aumentando aún más la tasa de desempleo.
En el plano local, muchos son los pequeños empresarios que de la noche a la mañana, vieron desplomadas sus ventas hasta en un 70 por ciento, y al ser ésta su única fuente de empleo, se ven en la necesidad de continuar operando para ganarse el sustento diario.
Pese al riesgo que conlleva, algunos de ellos continúan prestando servicios en sus locales, siguiendo las medidas adecuadas que dictó la Secretaría de Salud a fin de prevenir la propagación del Covid-19; en tanto que otros, principalmente del giro de venta de comida, han optado por la entrega a domicilio, lo que les genera ingresos que les permiten sobrellevar la crisis económica y garantizar el pan de cada día en sus hogares.
Varios empresarios están sufriendo los efectos colaterales de la emergencia sanitaria que invita al aislamiento social. Tal es el caso de Efraín de los Santos González, quien se dedica a la reparación y mantenimiento de climas a domicilio. El temor de la gente de contraer la enfermedad ha provocado que pocos soliciten su servicio, además de que muchos de los negocios a los que les trabajaba tuvieron que cerrar, también por la contingencia.
“La situación me ha pegado en la parte económica, porque hay personas que con el miedo del virus desconfían un poco, aunque yo tomo las precauciones debidas al momento de prestar mi servicio; además, varios negocios a los cuales les brindaba mantenimiento cada 15 o 20 días cerraron, y de aquí es donde saco el sustento de mi familia”, señaló.
Otro negocio que sufre por la caída en sus ventas es la taquería “El Burócrata”, afectando la paga de los empleados. Aquí cuentan con seis empleados que se turnan para que sólo haya tres al mismo tiempo en el lugar, acatando así las medidas de prevención. Pese a la situación, no bajaron cortinas y siguen en la lucha por el sustento diario.
“Nos toca estar por el bienestar de nuestra familia, y sobre todo, el hecho de que llevamos de comer a nuestras casas, eso es lo que nos tiene en pie en este negocio”, dijo uno de los empleados.
Uno de los negocios que más embates ha sufrido a causa del confinamiento es Visual Optics, en donde sus ventas se redujeron en un 90 por ciento en las últimas tres semanas, siendo la peor caída que han sufrido.
No solo es un tema de emergencia sanitaria, también de una emergencia económica en la que los pequeños y medianos empresarios estamos batallando para poder mantener nuestras empresas a flote
Davitza Repostrería es otro negocio que ha sufrido pérdidas debido a la cancelación de eventos sociales que estaban programados para marzo, abril y mayo.
“Hemos tenido que vender a menudeo los postres para ir sacando los gastos”, refirió su dueño.