Un ostentoso hundimiento sobre la avenida, Adolfo Ruiz Cortines, se ha convertido en una trampa letal para los automovilistas que transitan por ahí; quienes para esquivarlo deben dar sorpresivos volantazos.
Y es que sin importar que esta sea una de las avenidas más transitadas de la Capital Villahermosina, y que además sea una vía rápida, dicho hundimiento lleva más de dos semanas sin ser atendido, por lo que con el paso constante de los automóviles está incrementando su dimensión rápidamente.
De acuerdo a algunos automovilistas, su localización (pegada hacia el camellón de alta) es difícil de divisar, situación que los obliga a disminuir la velocidad drásticamente para atravesarlo sin dañar sus neumáticos, o bien, dar volantazos sorpresivos.