Con más de 5 años de experiencia en animación en fiestas infantiles, Pitito y Pastelito son dos personajes que cada día se ganan la vida llevando alegría y una sonrisa en las principales calles y cruceros de Villahermosa. La pandemia los llevó a mostrar su oficio en las calles y cruceros de la ciudad
Esto debido a que por la pandemia de Covid-19, escasearon las oportunidades en fiestas y eventos, por lo que no les quedó más remedio que depender de algunas monedas que los espectadores les regalan tras disfrutar de su breve espectáculo.
Oriundos, uno de Villahermosa y otro de Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, han probado suerte en ambos estados, aunque de momento decidieron trasladar sus “oficinas” a la capital tabasqueña, ya que según ellos en el vecino estado la situación se encuentra más difícil, tanto en materia económica como a causa de la pandemia.
La crisis sanitaria los llevó a los semáforos
“Estábamos dedicados a las fiestas infantiles, pero pues por la pandemia tenemos que venir al semáforo, pero para nosotros no es vergonzoso, ni nada de esto, estamos aprendiendo, le transmitimos a la gente alegría, una sonrisa, eso es lo más valioso, lo más importante”, expresó Pastelito.
Día a día ambos se levantan temprano, y después de maquillarse y vestirse su atuendo de trabajo salen a las calles a llevar su alegría a los principales cruceros.
Se inspiran en Tin Tan y Capulina
“Tratamos de estar temprano para que se alegre la gente que apenas va a la chamba”, señaló.
Pastelito comentó que su compañero Pitito ya tenía algún tiempo trabajando, pero lo invitó a hacer algo juntos, y se empezaron a coordinar y de ahí surgió la chispa, misma que transmiten en cada acto a los espectadores.
Reconocen que para ello se basan en grandes personajes de la comedia en México, como el Pachucho de Oro, Tin tán y su carnal Marcelo, así como al Rey del humorismo Blanco, Capulina y su pareja Viruta.
“Esto nos permite que diario llevemos un sencillito a la casa para que la familia sobreviva”, comentó.
Agregó que recientemente fueron a probar suerte a Chiapas, pero allá está un poco más baja la actividad, debido también a la pandemia: “Está más fuerte la situación y nos tuvimos que encerrar 4 días, echándonos más cloro, tanto que hasta más chelo me veo, y por eso regresamos a nuestras oficinas en Villahermosa”.
Con este chiste improvisado, ambos humoristas se despiden para seguir realizando sus suertes en cada cambio de semáforo en una de tantas avenidas de la ciudad de Villahermosa.