Joaquín Romero López, Presidente de la sección Tabasco de la Asociación Mexicana de Hidráulica, hizo un llamado a los tres niveles de gobierno para concretar políticas de uso eficiente del agua potable, ya que 40 por ciento de lo que se produce, por parte de los organismos operadores, se desperdicia a través de fugas. Situación que eleva de manera considerable los costos de producción.

Refirió que, como ejemplo, en la ciudad de Villahermosa se tiene una producción de 2 mil 600 litros de agua por segundo, cuando la necesidad de consumo de la población es de 2 mil litros por segundo.

“Es decir, que tenemos 600 litros que estamos mal operando en fugas, en tomas clandestinas. Es decir, que estamos gastando más de lo que necesitamos”, afirmó.

En entrevista, señaló que es necesario ver el agua desde un manejo de integral, para lo cual, han platicado con las diferentes instancias de gobierno para ver de qué manera se les puede apoyar.

En el caso de Tabasco, dijo que el principal problema es que el agua no se ve desde un punto de vista sustentable.

“Por ello, tenemos comunidades donde el agua que usamos la mandamos a nuestros cuerpos de agua, a nuestras corrientes superficiales y una comunidad abajo la está utilizando para volverla a meter a procesos de potabilización. Cada día se nos están haciendo más caros los proceso porque tenemos que desinfectar más el agua, tenemos que ver que este tipo de problemática empiece a mejorar desde un manejo más sustentable”, estableció.

Romero López indicó que se tiene que hacer conciencia de esa parte por que a final de cuentas el agua es necesaria para todos, “el derecho humano para todos nos dice que todos los organismos operadores necesitan dar agua de calidad y en cantidad necesarias”.

Reconoció que en Tabasco, la abundancia del agua ha dado la oportunidad incluso de despilfarrarla o hacer quizá un uso excesivo del agua, “necesitamos cambiar eso, nuestros sistemas de operación están produciendo más agua de la que se necesita en cualquier parte del estado. Lo que lleva a que crezcan los costos de operación y con esto, muchas veces, los organismos y los gobiernos no pueden dar la calidad del servicio que se requiere”, opinó.