El Fideicomiso para el Fomento y Desarrollo de las Empresas del Estado de Tabasco (FIDEET) sigue siendo saqueado. Sólo que ha cambiado de saqueador. En la administración de Arturo Núñez Jiménez eran grupos de empresarios inconscientes a los que se les financiaban proyectos por millones de pesos sin ningún resultado.
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Sin embargo, el 25 de noviembre del 2020, el gobierno del estado, a través de la Secretaría de Finanzas, solicitó al FIDEET un retiro parcial de recursos por 150 millones de pesos.
Sin mayor argumento que la solicitud obedecía a “las diversas acciones emprendidas por la actual Administración Pública Estatal para atender el escenario económico adverso”, el Contador Público Said Armenio Meza Oropeza, titular de la Secretaría de Finanzas, solicitaba someter a consideración del Comité Técnico la autorización para que se hiciera la entrega a la Secretaría que el dirige, de la cantidad de 150 millones de pesos.
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Más que solicitud, la Secretaría para el Desarrollo Económico y Competitividad (SEDEC) lo tomó como una orden a cumplir. El Comité Técnico, cuyo presidente es el Titular de la SEDEC, sesionó de forma extraordinaria el 3 de diciembre del año pasado y aprobó dicho requerimiento presentado por la Secretaría de Finanzas, y el 17 de diciembre realizó el depósito de los 150 millones de pesos al gobierno del estado.
Para mayor certeza de la transferencia realizada, a SEDEC adjuntó a su escrito de respuesta a Finanzas el comprobante de depósito. Hay que señalar que el FIDEET fue pensado para ofrecer apoyos a grupos empresariales, por lo que fue muy cuestionado en 2017 cuando se hizo pública la entrega de más de 50 millones de pesos a un grupo de contadores. Sin embargo, esta situación en la que el gobierno del estado se beneficia, es inédita.
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Durante el 2020, el gobierno del estado solicitó un empréstito a corto plazo por 3 mil 600 millones de pesos, mismos que al parecer no fueron suficientes, ya que el FIDEET aportó estos 150 millones de pesos y a pesar de ello, antes de que Adán Augusto fuera designado titular de la Secretaría de Gobernación, obtuvo una autorización del Congreso del estado para contraer deuda por mil 500 millones de pesos.