Del año 2015 al 2022 el número de vacunas antirrábicas aplicadas a perros y gatos en la entidad ha venido de más a menos. En algunos municipios las dosis aplicadas han caído a más de la mitad. Los más afectados son Cárdenas, Centla. Cunduacán, Huimanguillo y Jonuta.
Datos de la Secretaría de Salud del gobierno del estado entregados a El Heraldo de Tabasco, vía transparencia, muestran que las vacunas contra la rabia, aplicadas a las mascotas caninas que conviven con algún tabasqueño ha pasado de 267 mil 394 dosis distribuidas en las 17 demarcaciones del estado en 2019 a 166 mil 421 al cierre del mes de noviembre del 2022. Lo que significa cien mil dosis menos en cuatro años, los mismos que lleva la actual administración de gobierno.
Si bien, la reducción del biológico contra la rabia se ha reducido en todos los municipios, los más afectados son Huimanguillo y Centla, donde las dosis aplicadas pasaron de 29 mil 195 y 11 mil 936 en 2019 a 10 mil 101 y 4 mil 257 en 2022.
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¿Cuánto se redujo el número de dosis para perros y gatos?
Las reducciones de los biológicos para caninos fue poco más del 60 por ciento en estas demarcaciones.
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Los felinos para los que se ha buscado protección contra la rabia en general han seguido el mismo camino de los caninos. El número de ampolletas aplicadas para protegerlos ha venido de más a menos.
Sin embargo, en el caso de los gatos, el mayor número de piquetes se registró en el año 2020, cuando la cantidad de mininos protegidos llegó a 45 mil 73, mientras que al cierre de noviembre del 2022, las dosis aplicadas llegaron a los 23 mil 383 animales vacunados.
¿En qué municipios se incrementó el antirrábico para los gatos?
A nivel de municipios se encuentra la diferencia. Mientras en Cardenas, Centla. Cunduacán, Huimanguillo y Jonuta la inoculación a gatos caseros cayó más de un 60 por ciento, en Tacotalpa y Emiliano Zapata, el número de felinos a los que se les aplicó la antirrábica se incrementó en más de un 30 por ciento.
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Cabe señalar que la dependencia sanitaria señaló que no ha invertido recursos en la compra de vacunas contra la rabia, ya que su trabajo se remite a distribuir los biológicos que reciben, aunque sin señalar de quién.