Pese a que las lluvias han dado tregua a la entidad, el río Usumacinta continúa causando estragos en los poblados que están en sus orillas.
Mientras que familias de 42 comunidades afectadas por el desbordamiento de este afluente, se niegan a salir de sus viviendas.
Aparte del peligro que representa para estos habitantes la creciente, en las últimas 12 horas el aumento de este cuerpo de agua fue de 11 centímetros, incrementó que ya lo tiene por encima de su nivel máximo y ahora suma 12.09 centímetros.
Esta situación ha causado afectaciones en caminos, hectáreas de maíz y por su puesto en hogares, que ya se encuentran rodeados o dentro del agua.
Todo lo anterior ya tiene listo los albergues para recibir a los damnificados, sin embargo las personas confían que pata el viernes o sábado los niveles del río desciendan.