Un juez federal ordenó a la Fiscalía General del Estado (FGE) de Tabasco, la devolución de 267 semovientes a sus propietarios en Jonuta. De esta manera la familia Lezama Zubieta recuperará sus reses, que fueron sacadas de su propiedad el 3 de abril de 2021, hecho que dio a conocer El Heraldo de Tabasco.
Una vez notificada la instancia tendrá 15 días para devolver los animales, mencionó un miembro de esta familia. Además, se podrá poner un incidente en caso de que hubiera reses faltantes del lote original, más las crías correspondientes a los dos años de producción que tuvieron los animales asegurados ilícitamente.
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De esta manera, queda claro que los propietarios del ganado son los antes mencionados, pese a que la Fiscalía en su momento emitió un comunicado en el que se indicado que el juez no se había pronunciado con respecto a quién era el propietario de los bienes asegurados.
El documento con fecha del 23 de mayo del 2023 específica que se lleve a cabo la entrega de los animales a sus propietarios: “Al agente del Ministerio Público Especializado en Abigeato, en la Ciudad de Balancán, Tabasco, para que con relación a los semovientes asegurados, realice ante la autoridad correspondiente el registro y aretamiento de los animales en cuestión a nombre del aquí quejoso, ello con la finalidad de que dichos semovientes sean trasladados al rancho San Gerónimo del municipio de Jonuta, Tabasco”.
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¿Cuándo fueron sacadas las reses del rancho?
En el lugar señalado es donde el calvario inició para estas personas que son la quinta generación de ganaderos. El día de los hechos, trabajadores del rancho, les informaron que un grupo armado había llegado a la propiedad ubicada en la ranchería Alto Amatitán.
“Sin más ni más se llevaron 267 cabezas de ganado, de las cuales, 252 son de la raza Nelore Mocho, Indubrasil, Gyr y Sardo Negro, así como nueve toros de la raza Nelore, y el resto vacas criollas, conocidas como Vientres Gestantes Bovinos”, mencionó uno de los afectados a esta casa editorial.
Para acceder al rancho, los desconocidos rompieron candados y removieron postes, ocasionando daños al alambrado. Posteriormente se llevaron el ganado a la colindancia con el estado de Campeche, a una comunidad que le pertenece a Palizada.
No fue sino días después cuando se enteraron que fue la FGE la que se había llevado sus reses, ya que en esas fechas se emitió un comunicado dando a conocer duro golpe al abigeato en Tabasco, con el aseguramiento de 267 cabezas de ganado recuperadas en Jonuta. No obstante, por las imágenes que salieron en los medios de comunicación, supieron que las reses eran las suyas, pues tenían la marca de su fierro.
“Desde entonces ha sido un largo peregrinar por distintas instancias de gobierno y judiciales, con los registros SINIIGA, bancarios y de la Asociación Ganadera Regional de Tabasco, y toda la documentación debida que avala la legal propiedad del ganado extraído”, señaló el entrevistado. Con información de José Pérez