Responde INM a acusaciones de Dulce Susana Jacobo 

La joven que estaba retenida en la caravana migratoria, acusó a Migración de malos tratos que recibió en su estadía en la estación

Rubén Concepción Góngora | El Heraldo de Tabasco

  · lunes 27 de enero de 2020

Foto: Carlos Pérez | El Heraldo de Tabasco

Tras las acusaciones que realizó la estudiante de Morelos, Dulce Susana Jacobo Cruz, en contra del Instituto Nacional de Migración de malos tratos a migrantes, salió el INM a responderle.

A través de una tarjeta informativa, dijo con respecto a la estudiante que declaró ante medios de comunicación haberse hecho pasar por una migrante de nacionalidad hondureña para realizar un trabajo de investigación al interior de las estaciones migratorias, el Instituto Nacional de Migración informa que:

Actúa en apego a la Ley de Migración y su Reglamento.

El personal del Instituto no cuenta con instrumentos que generen daño físico a las personas, ni de sometimiento. En cuanto al personal de la Guardia Nacional y Policía Estatal que se encuentra en resguardo de las instalaciones, no cuentan con aparatos de electrochoque ni se les permite la portación de armas de fuego al momento de estar cerca de los extranjeros alojados en las estaciones migratorias.

De acuerdo con la legislación vigente, a cada extranjero con condición migratoria irregular, se le lleva a cabo un Procedimiento Administrativo Migratorio en el que se determina su situación jurídica. En tanto, debe permanecer en las estaciones o estancias migratorias y sus objetos personales quedan en resguardo del INM, con la finalidad de preservar la propia seguridad de los extranjeros. Se les otorga un recibo para devolución al momento de abandonar las instalaciones.

Al ingresar a una estación migratoria se les informa sobre los derechos y obligaciones que conlleva su estancia, se les hace de conocimiento sobre la posibilidad de solicitar refugio. En caso de que no exprese esta necesidad de protección se lleva a cabo la notificación consular. Las personas pueden realizar llamadas en horarios determinados a través de líneas seguras proporcionadas por el propio Instituto.

Las autoridades migratorias informaron a los integrantes de la caravana que llegó a El Ceibo en Tenosique, Tabasco sobre la posibilidad de alojarse en un albergue o estación migratoria, en donde contarían con espacios dignos para descanso, baños, regaderas y alimentación, mientras se definía su situación jurídica, lo que podía desembocar en la regularización, retorno asistido y/o acceso a trabajo en México o en sus países de origen.

En el caso de la estudiante, ella misma refiere haberse hecho pasar por extranjera con la finalidad de ingresar en la estación migratoria, por lo que se le brindó el mismo trato que a un extranjero, con pleno respeto a sus derechos humanos.

En ningún momento se identificó como mexicana, o presentó documento alguno que lo acreditara, por lo que las autoridades no cuentan con papeles de la estudiante. Ingresó voluntariamente bajo el cuidado de la autoridad migratoria en dos ocasiones, una en El Ceibo y otra en Villahermosa.

La estudiante nunca denunció malos tratos o violaciones de derechos humanos ante la oficina foránea de la Comisión Nacional de Derechos Humanos a la que asistió mientras estuvo fuera de la estación de El Ceibo y previo a ingresar voluntariamente por segunda ocasión a la de Villahermosa.

Personal de la Secretaría de Bienestar, de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, de Protección Civil Nacional y de ACNUR, estuvieron presentes en el procedimiento de recepción de la caravana. De manera habitual, la CNDH mantiene visitas constantes a cada una de las estancias.