Después de haber sido acusado por el secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández de huir como un delincuente al terminar su sexenio, el exgobernador de Tabasco, Arturo Núñez Jiménez reapareció ante la mirada pública.
Esto solo para posicionarse en contra de la Reforma Electoral propuesta por el presidente Andrés Manuel López Obrador, misma a la que calificó como ilegítima, partidarista, centralista y opaca.
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El exfuncionario argumentó que tanto esta como las otras reformas electorales se han dado mediante un acuerdo entre partidos de oposición junto con el gobierno en turno. Sin embargo, dijo que esta propuesta está monopolizada solo desde el gobierno.
Expuso que se trata de una reforma partidista, ya que cambia el modo de elegir a los consejeros electorales por elección popular. “No se compara en nada con la partidización que generaría una participación por sufragio universal, libre, secreto y directo”, señaló.
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Mencionó que el modelo mediante el cual se realizarían las elecciones en caso de aprobarse tendría imparcialidad en cuanto a los consejeros elegidos, por lo que expuso, se trataría de “consejeros a modo”.
Cabe señalar que Núñez aún carga acusaciones en su contra por no dar respuesta al caso del helicóptero perdido, así como de otras irregularidades cometidas durante su administración.Donde incluso ha sido señalado por los militantes de su propio partido, quienes lo califican como vendido.
