La historia de la cueva de la ciudad, ubicada en la colonia El Águila, podría estar llegando a su fin, ya que cada vez el terreno se observa cubierto por la vegetación, a lo que se suma un posible cambio de propietario.
En un recorrido realizado por el lugar, se pudo constatar que gran parte de la extensión donde se encuentran obras subterráneas ha sido cubierta por vegetación.
Sin embargo, llama la atención que la barda perimetral es nueva y se integra al espacio que ocupa la Fiscalía General del Estado de Tabasco.
Se puede ver que una protección metálica rodea lo que se considera un espacio de misterio y cultural.
Cabe recordar que anteriormente se podían apreciar en el exterior diversas figuras de madera, que fueron hechas hace algunas décadas por el artista Rafael León Rueda.
Al ingresar a la cueva también se observa diversas obras artísticas que fueron esculpidas y que, hasta el año pasado, aún se mantenían en buen estado.
Así este espacio que se mantuvo vivo por mucho tiempo podría ceder debido a que no hay nadie que se haga cargo del lugar.
En los últimos años, autoridades culturales no se han pronunciado sobre la importancia y el aporte a la entidad.
