Iniciaron las clases y con ellas el calvario de cientos de padres de familia tabasqueños que ante las dificultades económicas que han enfrentado en los últimos meses por la emergencia sanitaria, se ven en la necesidad de “estirar” su presupuesto para hacer frente a la compra de útiles escolares y uniformes como cada arranque de ciclo escolar.
Lee también: [Sondeo] Inapropiado, el protocolo para el regreso a clases
Por ello, como ocurre tanto para estas fechas como en los primeros meses del año, las casas de empeño y préstamo han incrementado sus actividades hasta en un 30 por ciento.
Para este tipo de giros, esto representa a su vez un aliciente a 4 meses de que termine el año, ya que les permitirá elevar sus niveles de colocación y aumentar su clientela de clientes y deudores.
Con tasas que van desde el 7 hasta un 15 por ciento mensual, que a la larga se traduce en niveles de hasta 30 por ciento anual, en caso de algún retraso en los pagos, este tipo de establecimientos desde finales de agosto hicieron sus previsiones para contar con capital para colocar en créditos prendarios a los ciudadanos.
Tan sólo en el corredor de la avenida coronel Gregorio Méndez operan unos 20 negocios de este tipo, a donde diariamente decenas de personas acuden con la esperanza de conseguir recursos para surtir la lista de útiles escolares.
Quizá te interese: Con “paletitas” buscan evitar Covid en clases presenciales de Tabasco
“La colocación ha aumentado en un 30 por ciento en los últimos días”, señala Bertha, empleada de uno de estos negocios, quien pidió mantener el anonimato ya que por secrecía las empresas no ventilan esta información.
Sin embargo, dijo que diariamente llegan a atender de 20 a 30 personas, que llegan con diferentes tipos de prendas a empeñar.
Desde relojes y alhajas, teléfonos celulares, tabletas electrónicas, hasta equipos de cómputo, pantallas de plasma y diferentes tipos de aparatos electrónicos, inclusive hasta instrumentos musicales desfilan a diario por las manos de los valuadores, quienes otorgan un préstamo invertir al valor de las prendas, aunque por necesidad al cliente no le queda otra que aceptar.
En ese sentido, el titular de la Odeco, Pedro Aldecoa Calzada, comentó que las quejas contra las casas de empeño son muy esporádicas, y aunque son autónomas tienen que regirse a través de un contrato de adhesión que debe estar registrado ante la Procuraduría Federal del Consumidor.
Lee más: Inician clases presenciales en Tabasco
Por ello, llamó a los ciudadanos a leer con atención los contratos para enterarse de los intereses que pagarán en caso de caer en mora, a fin de evitar al final de cuentas perder la prenda que empeñaron.