Luego de que algunos salieron “raspados” en la calificación de las cuentas públicas 2018, el secretario de Gobierno, Marcos Rosendo Medina Filigrana recomendó a los actuales alcaldes que pongan “sus barbas a remojar” para no resultar reprobados en lo que resta de sus trienios.
Resaltó que los legisladores locales hicieron un trabajo inédito al reprobar muchas cuentas, incluyendo las de dos poderes (Ejecutivo y Judicial) y ahora hay que tener paciencia y aguardar a que las instancias competentes den seguimiento al asunto.
“No nada más esté en manos el Órgano Superior de Fiscalización, dependiendo de la gravedad de lo que se dé cuenta estará en el ámbito del Tribunal de Justicia Administrativa y de la propia Fiscalía General del Estado”, expresó.
Cuestionado en el sentido de que la Fiscalía Anticorrupción debe ya empezar a trabajar y deslindar responsabilidades, el encargado de la política interna refirió que eso es precisamente lo que tienen que hacer las autoridades estatales de manera congruente e institucional.
Dijo que los expresidentes municipales son los que absorben la mayor carga en los recursos que no se solventaron, mientras sus sucesores seguramente heredaron en los últimos tres meses rezagos y falta de comprobación de gastos de las anteriores administraciones.
De tal forma que si ya se sentó un precedente en el actuar del Poder Legislativo habrá que seguir adelante y no echar marcha atrás.
“El llamado –dijo- a los presidentes municipales es que pongan sus barbas a remojar porque hay un congreso que sí actúa, que está trabajando, que hay un OSFE que trabaja en forma más comprometida con el estado”.
De acuerdo a la información del OSFE, los 17 municipios de Tabasco acumularon observaciones por más de mil 128 millones de pesos y de estos 234 millones corresponden a los primeros tres meses de gobierno de los ediles en turno.