Son aproximadamente 400 las escuelas que resultaron afectadas por las inundaciones y que necesitan ser incluidas en los programas de apoyo federales para su rehabilitación, indicó el presidente de la Asociación Estatal de Padres de Familia, José Atila Montero Acosta.
Refirió que la organización que dirige estará muy al pendiente para que no ocurra lo mismo que en 2017 cuando el sismo de magnitud 7.1 en la escala de Richter ocasionó afectaciones a cerca de 80 planteles educativos y la gran mayoría nunca fue atendida.
“Tomando en cuenta la magnitud del problema derivado de los frentes fríos, hubieron más de 400 escuelas afectadas en el estado, principalmente aquellas situadas en zonas bajas y que tienen una estructura caduca porque fueron construidas hace más de 40 años y en tiempos de lluvia les afecta la humedad”, expuso.
Insistió en que la Secretaría de Educación insiste en señalar, equivocadamente, que son solamente poco más de 50 escuelas dañadas, cuando el número es muy superior, según los reportes que han emitido los representantes de la asociación desde los municipios mayormente golpeados por las inundaciones.
Por lo que llamó a la dependencia a realizar un levantamiento minucioso de cuántas instituciones educativas quedaron en malas condiciones y que requieren de limpieza, desinfección, pintura y toda una serie de rehabilitaciones para que estén en óptimas condiciones al regreso de las clases presenciales.
Explicó que los planteles con mayor afectación se encuentran en Centla, Jonuta. Huimanguillo, Teapa, Macuspana, Cárdenas y Nacajuca, entre otros, situados por lo general en comunidades cerca de los ríos.
Montero Acosta invitó a los padres de familias a denunciar en las redes sociales cuáles escuelas sufrieron los estragos de las inundaciones para hacer una lista, independientemente de la información que tiene la SETAB, para hacerla llegar a las autoridades responsables de los programas de apoyo a escuelas afectadas.
Nosotros queremos que las incluyan a todas porque hay muchas que además del daño físico, perdieron mobiliario y equipos debido a que el agua les llegó arriba del pizarrón en los salones
puntualizó el líder de padres
Y es que la secretaría de Bienestar dio a conocer que las escuelas de Tabasco en zonas de alta marginación y que fueron afectadas por inundaciones, podrían ser tomadas en cuenta para apoyos en el 2021 dentro del programa “La Escuela es Nuestra”.