Pide reincorporarse a su trabajo

En el año 2007 José Antonio Cornelio López tuvo un accidente laboral en medio de la gran inundación de Tabasco.

Ruth Pérez Magaña

  · jueves 25 de abril de 2019

El dictamen médico de José Antonio es de discapacidad total permanente, lo que le impide un retiro digno. /Javier Chávez

En el año 2007 José Antonio Cornelio López tuvo un accidente laboral en medio de la gran inundación de Tabasco.

Una góndola le cayó encima al momento que apoyaba en labores de rescate de familias en la ranchería Emiliano Zapata cercano al Parque Tabasco y ha quedado sin protección pese a que el accidente fue en horas de trabajo.

Familiares del empleado de Central de Maquinaria de Tabasco (Cematab) han tocado puertas a fin que les permita reincorporarse a su centro laboral para poder cumplir con los requisitos y así tener un retiro digno.

A 12 años del accidente, José Antonio tiene 43 años de edad y con apoyo de una andadera camina, conduce vehículos y se dice en condiciones de poder seguir laborando, pero el dictamen médico no lo permite porque lo coloca como una discapacidad total permanente.

De quedarse con la incapacidad permanente, el trabajador recibiría un estimado de 500 a 700 pesos al mes, lo cual no le alcanzaría para poder subsistir y es la razón por la que solicita continuar desempeñando una actividad para cobrar su salario completo.

“El dictamen médico del ISSET es una limitante, y desde el mes de enero le retuvieron sus salarios”, señaló un familiar, quien pidió no revelar su identidad.

José Antonio tiene dificultades para hablar debido al traumatismo, por lo que su familia solicita que en un acto de humanidad le permitan seguir trabajando para poder cumplir con los años que marca la ley y retirarse.