Obras en Villahermosa desatan inconformidades y embotellamientos

Prácticamente toda la semana provocan embotellamientos las obras de construcción de los malecones en Gaviotas y en el centro de la capital

Jesús Domínguez | El Heraldo de Tabasco

  · domingo 6 de agosto de 2023

Convulsionada mantienen a la Ciudad de Villahermosa, los cinco puntos de conflicto, donde se realizan diversas obras, que generan caos vial y levantan quejas e inconformidades de la población. Prácticamente toda la semana provocan embotellamientos las obras de construcción de los malecones en Gaviotas y en el centro de la capital. Así como los distribuidores viales de Guayabal y de avenida Universidad, a los que se suma el acueducto Usumacinta recién iniciado.

Aunque el tráfico bajó de intensidad considerablemente este domingo en estos sitios donde se pudo apreciar muy poca afluencia vehicular de particulares y unidades del servicio público. Una de las más conflictivas es la zona donde se construye el "interminable" malecón Carlos A. Madrazo que por estar en pleno centro de la ciudad sigue siendo cuestionado.

Lee más: Siguen suspendidas las obras en la Catedral de Tabasco

Para Ricardo Díaz, quien llevó a su familia a realizar unas compras, estas son las consecuencias lógicas de materializar la obra pública. Añadió que las circunstancias climáticas y de orden natural son causa también de los retrasos que este proyecto presenta, aunque me con aparte merece el pesado tráfico que se genera a diario.

"Por supuesto que toda obra que se realice levanta inconformidad, obvio que la ciudadanía se ve afectada temporalmente, pero siempre hay que pensar en que serán de beneficio para todos", expuso. Por su parte, Pedro Gutiérrez es encargado de un hotel situado sobre la avenida Francisco I. Madero, a unos metros de la obra, asegura que el hospedaje ha bajado en más del 50 por ciento gracias a la construcción del nuevo malecón.

Recibe a partir de ahora las noticias más importantes directo a tu WhatsApp

"Entendemos que la obra es para mejorar, pero nos hemos convertido en una "zona muerta" y ha producido una merma en la actividad hotelera", subrayó. Con el regreso a la actividad, después del fin de semana, Villahermosa regresará a convertirse en la misma caótica capital a la que tienen que enfrentarse automovilistas, peatones, comerciantes y habitantes.