La decisión de permitir que las combis del servicio público tuvieran como base la calle Agustín Iturbide en la colonia Tamulté, fue un arma de doble filo, pues se genera tráfico la mayor parte del día.
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Justamente atrás del mercado Miguel Orrico de los Llanos, se arma el cuello de botella, ya que el transporte suburbano ocupa toda una cuadra completa, incluso un poco más.
Como se recordará, hace unos meses se había retirado el transporte público, pero semanas después se les permitió nuevamente ubicarse a un costado del mercado.
Comerciantes señalaron que esto limita que los clientes del mercado tengan un lugar donde estacionarse, por lo que muchos optan por irse a un lugar que cuente con estacionamiento.
Es notorio que el ambulantaje fue controlado casi en su totalidad, pues muy pocos se ven en las banquetas como en años anteriores.
En un recorrido se pudo constatar que en el caso del comercio de frutas y verduras, la mayoría ocupan locales cercanos a la zona.
