Niñas embarazadas, el pan de cada día

En cifras, Tabasco es de los estados con mayor número de casos

Jesús Manuel Domínguez

  · sábado 18 de mayo de 2019

Conforme incrementa la edad, el problema del embarazo adolescente en Tabasco se acentúa. /Carlos Pérez

México es el país miembro de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) con más adolescentes embarazadas y en ese contexto Tabasco se encuentra entre los líderes de más niñas que se convierten en madres por causa de abuso sexual o desinformación.

Según datos de la Dirección General de la Información en Salud de la Secretaría de Salud del gobierno federal, en el estado 171 niñas de 14 años dieron a luz, lo mismo que otras 38 con 13 años de edad y siete más con 12 años de edad; la mayoría en el municipio de Centro.

Además, se reporta que en Comalcalco dieron a luz una niña de 11 y otra de 10 años.

Conforme incrementa la edad, el problema del embarazo adolescente en Tabasco se acentúa. Los datos arrojan que 413 jóvenes de 15 años dieron a luz entre enero y agosto de este año en el estado; otras 742 jóvenes de 16 años también se convirtieron en madres, así como mil 20 jóvenes más de 17 años.

En ellas se ve comprometida su salud, porque su cuerpo no está preparado para la maternidad y se convierten en fábricas de maltrato y abandono infantil, ya que no tienen las herramientas para ejercer una crianza responsable.

A decir de Alejandra Arias Gómez, presidenta de la asociación civil Aldea por los Niños, las niñas adolescentes y preadolescentes que se convierten en madres son, a menudo, víctimas de abuso sexual.

“Hay un alto porcentaje de niñas que son madres porque son víctimas de abuso sexual, el embarazo en adolescentes es una fábrica de niños abusados, abandonados, violentados; las madres adolescentes en su mayoría no tienen las herramientas para ejercer una crianza responsable”, enfatizó.

En el mismo orden, advirtió que el futuro de las próximas generaciones se puede ver comprometido ante la ignorancia e incompetencia de las autoridades, que no han atendido las recomendaciones del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF).

Esto, en el sentido de que se requieren políticas públicas que involucren a todos los niveles de gobierno para evitar que niñas y adolescentes resulten embarazadas, lo que va más allá de una campaña mediática.

Por su parte, el presidente de la Comisión de Salud del Congreso del Estado, Manuel Antonio Gordillo Bonfil, indicó que lo primordial es la prevención, pues si las jóvenes no están educadas acerca de cómo ejercer responsablemente su sexualidad, difícilmente se va a revertir el problema del embarazo adolescente.

Nosotros –dijo- hemos insistido en que la prevención en la educación sexual desde la primaria debe ser más contundente y en lo que respecta a la Secretaría de Salud, esta dependencia tiene la responsabilidad de fomentar la salud sicosexual desde la adolescencia.