Paraíso, Tabasco.- Solo bastaron 10 minutos de lluvia para que una vialidad en Paraíso colapsara, lo que dificultó el tránsito vehicular.

Las precipitaciones que cayeron provocaron que el bulevar Manuel Antonio Romero se inundara; la glorieta por el Cangrejo Azul ahora no solo vio circular unidades, también el agua que por momentos hacía “figurar un pedacito de mar” escribió una cibernauta.

Los vehículos tenían forzosamente que alentar la circulación ante la cantidad de líquido que había sobre la calle; por momentos se hacían pequeñas filas de autos, mientras la velocidad de estos al chocar con el agua formaba olas.

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La estatua del crustáceo era testigo mudo de lo que estaba pasando; hubo uno que en las redes sociales escribió: “Y el cangrejo que bello”.

Así transcurrió la tarde, en Paraíso, donde no fue necesario que lloviera por horas para que una vialidad se inundara.