El alcalde de Macuspana, Julio Gutierrez Bocanegra precisó que su administración tiene dispuestos 10 mil costales para protección de la cabecera municipal en caso de que sea necesario.

Además, se habilitaron 60 albergues para alojar a las familias que puedan resultar afectadas por una posible inundación.

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El edil de extracción morenista, aseguró que tras las anegaciones que se registraron el viernes en Macuspana, cuando llovió el triple de lo que podían desalojar los cárcamos, la situación se mantiene "controlada".

Afirmó que se ha hablado con directores de escuelas para poder habilitar los 60 albergues en caso de que se presente una emergencia por los fenómenos hidrometeorológicos.

Sin embargo, hasta el momento sólo se ha atendido a una persona de la tercera edad que sufrió una crisis nerviosa y que fue trasladado a un hospital para ser atendido.

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Reconoció que las localidades cercanas al río Puxcatán representan la zona de "riesgo", pero todo dependerá de lo que llueva en la serranía y lo que arrastre consigo el río Tulijá.

Protección en el Puxcatán no se entregará en noviembre

En otro momento, señaló que la obra de protección marginal que construye la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) en el río Puxcatán lleva apenas un 60 por ciento de avance, por lo que difícilmente se entregará en noviembre, como comprometió el organismo federal.

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Dijo que ya pidió que se refuerce la infraestructura después de que se dieran algunos deslizamientos por lo fangoso del terreno.

Además, también solicitó que se tapen con costalera las ventanas que se abrieron en la margen del afluente para permitir el paso de la maquinaria, para que esto no permita el paso del agua.