Del 2015 al mes de octubre del 2022, en Tabasco se han registrado mil 975 tomas clandestinas en los ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex), que se utilizan para el robo de hidrocarburos.

Aunque los “pinchazos” se reportan en 14 de los 17 municipios del estado, el mayor número se registra en los municipios de Huimanguillo, Cárdenas y Cunduacán.

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De acuerdo al reporte de Pemex proporcionado a El Heraldo de Tabasco vía transparencia, la extracción ilegal de hidrocarburo en poco se ha reducido en la entidad en los últimos siete años.

A pesar del plan para combatir el huachicoleo lanzado por el presidente de México Andrés Manuel López Obrador, en diciembre del 2018, en la entidad los “pinchazos” a los ductos de Pemex pasaron de 336 tomas reportadas en el 2015, a 201 rupturas de ductos en el 2018, el último año de la administración priista.

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Sin embargo, en el año 2019, con el programa antihuachicol lanzado por el gobierno federal, en Tabasco las tomas clandestinas llegaron a 536, el mayor número de robos en ductos reportados en los últimos ocho años.

A partir de ese año, los casos han bajado de forma paulatina: En el 2021, los registros de la petrolera mexicana llegaron a 182 pinchazos, y hasta el mes de octubre del presente año, las tomas ilegales llegan a 120. En total, en los últimos ocho años se han registrado mil 975 tomas clandestinas en 14 de los 17 municipios del estado.

A nivel de municipios, Huimanguillo ocupa el primer lugar en pinchazos con 888 casos en los últimos ocho años, seguido por Cárdenas, donde se han reportado 718 tomas ilegales, y Cunduacán con 263 reportes de robo de hidrocarburo en ductos.

El informe de la petrolera entregado a esta casa editorial muestra que el robo de hidrocarburo se ha extendido a 14 de los municipios del estado, y en los últimos años se incorporaron Jonuta, Nacajuca, Teapa y Centla, donde se han registrado entre una y dos tomas ilegales.

En las últimas fechas, el robo de hidrocarburo se ha relacionado con los derrames y explosiones ocurridas en el estado, algo que el director de la empresa, Octavio Romero Oropeza, ha señalado que pueden deberse a actos de sabotaje, aunque oficialmente la empresa lo registra como actos vandálicos.