Cobros de 10, 30, 50 y hasta más de 150 pesos es lo que pagan ciudadanos de Ixtacomitán, en Centro por los viajes en cayuco para adentrarse a zonas inundadas y saber qué ha pasado con sus pertenencias y sus animales de traspatio.
El argumento es simple: va o no va. Decenas de hombres en pequeñas embarcaciones hacen su agosto en pleno octubre, a consecuencia de las inundaciones que padecen diversas comunidades perteneciente a este municipio.
Cuotas que fueron desde los diez hasta los 150 pesos, y eso, aplicado con la mano en la cintura de los operadores… “si quiere…”.
Las zonas de Ixtacomitán con mayor necesidad de este servicio son las que aún se mantienen bajo el agua, como son la ranchería Amatal, y la colonia Carlos A. Madrazo, pertenecientes a la tercera y primera sección, respectivamente.