Ante la difícil situación económica que prevalece tanto a nivel nacional como estatal, continúa en aumento la actividad de las casas de empeño y préstamo.
Así, cada vez son más personas las que tienen que recurrir a este tipo de ingresos para solventar sus necesidades inmediatas.
Como ejemplo, este sábado una persona de origen humilde, se vio en la necesidad de cargar su lavadora hasta una de las casas de empeño que operan en el primer cuadro de la ciudad.