Totalmente abarrotado luce el tianguis comercial que se ubica en Bosques de Saloya, Nacajuca, donde la gente anda "alocada" comprando sin respetar las debidas medidas sanitarias, como la sana distancia.
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Es impresionante ver la cantidad de personas que se aglomera en los negocios de diferentes giros establecidos a lo largo de cinco cuadras.
Los más concurridos la mañana de este domingo son aquellos que venden frutas y verduras, ropa, zapatos y otra clase de artículos y accesorios.
Ahí se puede apreciar a decenas de personas, muchas madres con sus hijos pequeños, que se arremolinan desde temprano en busca de las ofertas o los precios más bajos.
Lo peor del caso es que aún cuando las cifras de contagios de COVID-19 han rebasado los mil casos en los últimos días, muchos no usan cubrebocas.
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Por su parte, los comerciantes no ofrecen gel antibacterial a los clientes ni hacen obligatorio el uso del cubrebocas para poder atenderlos, convirtiendo el sitio en lugar propenso para contraer el virus.
Tampoco hay autoridad alguna que ponga orden y obligue a los ciudadanos a asumir las recomendaciones dictadas por la Secretaría de Salud para evitar riesgos.
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