Además de las novedades en la venta de artículos de temporada como los relacionados con Halloween y Día de Muertos, entre los comercios locales principalmente ambulantes prolifera un juego que está de moda denominado Pop-it.
Se trata de objetos elaborados a base de plástico, con el detalle de que porta los colores de la diversidad sexual.
De acuerdo a los vendedores ambulantes, esto se usa para manejar los niveles de estrés entre la población.
Por ello, es una de las novedades que reportan mayor número de venta en estos momentos en las calles del primer cuadro de la ciudad, así como en los puestos ambulantes de la llamada Zona Luz, donde llama la atención el colorido de estos objetos cuyos precios van desde los 30 a los 50 pesos.
¿Qué son los pop-it?
Estos coloridos y blanditos objetos han ganado demasiada popularidad hoy en día. Su principal función es para aliviar el estrés a través del juego sensorial.
Tienen dos caras con un relieve de semiesferas que cambia: al apretarlas con el dedo las bolitas se aplanan y salen del otro lado del juguete.
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Su sensación es muy similar a la de reventar las burbujas que usan los plásticos de las paqueterías.
Los pop it forman parte de los juguetes antiestrés, pensados para manipular, ya sea girando, presionando o estrujando. Su invención fue para autorregular el estrés y la ansiedad en niños con hiperactividad o TDAH, déficit de atención, problemas de concentración, autismo, etc.