El representante electoral del PRD, Javier López Cruz reconoció que su partido está agonizando y permanece "inmovilizado" por culpa de los actuales dirigentes, tanto estatal como municipales.
"Todos los dirigentes son responsables de eso y la historia los va a juzgar, no sé si lo están haciendo inconscientemente o de manera deliberada, los cierto es que el PRD es un partido que está inmovilizado", apuntó.
Indicó que las dirigencias de los municipios no están funcionando y prueba de ello es que los militantes que participan en el proceso para la elección de delegados no tienen apoyo del sol azteca con asesoría jurídica, pues las oficinas se encuentran cerradas.
"Veo un partido parado, estancado, no hay dinamismo, un partido que está a punto de agonizar y lo peor de todo es que los dirigentes no tienen el interés de que esto cambie", expuso.
A mí -dijo- como militante fundador me causa lástima, depresión ver la inmovilidad que hay por parte de nuestros líderes, ver que los comités municipales ya no existen, que están desmantelados.
Acusó a Pablo Rodríguez Bonfil de haber dejado sin oficinas la dirigencia municipal de Macuspana. "Todo el mobiliario lo dejó arrumbado en una casa allá en ese municipio", abundó.
En entrevista con los medios de información, López Cruz consideró que es urgente la renovación en el Comité Directivo Estatal (CDE) perredista pero que se elija a un presidente con ganas de trabajar y sacar al partido adelante.
Y es que el proceso intermedio está a la vuelta de la esquina y es necesario empezar a construir el panorama mediante el que se puedan recuperar los espacios perdidos en los pasados comicios, donde Morena arrasó prácticamente con todas las posiciones.