Como parte de la revisión realizada por el Órgano Superior de Fiscalización del Estado (OSFE) de Tabasco a las obras realizadas por la Secretaría de Ordenamiento Territorial y Obras Públicas (SOTOP), el organismo revisor encontró diversas anomalías en el proceso de construcción de los deprimidos y el paso vehicular tipo herradura, que son parte del controvertido distribuidor vial de Avenida Universidad en la capital tabasqueña.

Las irregularidades detectadas ascienden a más de 20 millones de pesos; sin embargo, ante las justificaciones presentadas por la SOTOP, solo quedó en firme un daño al erario de 500 mil pesos. Los trabajos mal realizados fueron justificados a los ojos del OSFE, según se lee en el informe presentado al Congreso del estado.

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Derivado de la inspección física realizadas por el órgano fiscalizador a la obra del distribuidor vial de Avenida Universidad, la instancia constató que la construcción de deprimidos del Distribuidor Universidad presentaba irregularidades físicas estimadas en 3 millones 553 mil pesos, y que el paso superior vehicular tipo herradura de la misma vialidad presentaba trabajos ejecutados sin cumplir con las especificaciones y normas del proyecto, con un daño estimado en 16 millones 620 mil pesos.

Sin embargo, el OSFE señala que la dependencia que dirige Gildardo Lanestoza León, presentó justificaciones y aclaraciones respecto a las anomalías encontradas, por lo que el organismo revisor dio por reparado el daño del paso superior, quedando pendiente de solventar la cantidad de 3 millones 549 mil pesos correspondiente a las irregularidades físicas detectadas en los deprimidos del distribuidor vial.

El asunto no quedó ahí: El 10 de agosto de 2023, Lanestoza León, envío justificaciones y aclaraciones al OSFE, en relación a las irregularidades físicas detectadas en la construcción de los deprimidos, que para el organismo revisor fueron suficientes para reparar el daño y con ello dio por solventadas las irregularidades detectadas.

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No es lo único; como parte de la fiscalización al ejercicio 2022, el OSFE también revisó y analizó los expedientes unitarios de diversas obras, encontrando que la documentación que debe amparar su desarrollo, desde el inicio hasta su entrega, relacionado con los deprimidos (Puente inferior vehicular), en el Boulevard Adolfo Ruiz Cortines, no se encuentra debidamente integrada y presenta inconsistencias de contenido, ademas que comprobó que no se cumplió con lo establecido en el contrato.

La historia continuó con una segunda revisión realizada a los trabajos del 2022, el OSFE encontró nuevas fallas en los deprimidos por trabajos ejecutados sin cumplir con las especificaciones de los conceptos contratados, con un daño estimado en 536 mil 594 pesos, y de la construcción de red de drenaje pluvial para los pasos vehiculares inferiores (deprimidos), en el Boulevard Adolfo Ruiz Cortines, el historial de la obra se encontraba mal integrado, además de que no cumplieron con lo establecido en el contrato. De esta segunda revisión, el OSFE no dio por no solventadas ninguna de las dos observaciones realizadas.

A pesar de las irregularidades detectadas en las revisiones a la construcción del distribuidor vial, el OSFE aceptó las justificaciones proporcionadas por la SOTOP, y en el informe presentado al Congreso del estado a finales del mes pasado, solo quedó en firme un daño por 536 mil pesos en los trabajos realizados en la construcción del Distribuidor Vial Universidad, una obra que data del sexenio anterior y que fue modificada por la nueva administración morenista, sin que se pueda conocer su dimensión y contenido, ya que el proyecto se clasificó como reservado, mientras que de cuatro etapas anunciadas originalmente, ya se aprobó una quinta etapa y la obra parece no concluirse.