Aunque es ilegal que los diputados otorguen ayudas sociales, en 2018 el Congreso de Tabasco destinó alrededor de 8 millones de pesos a este rubro, según un estudio del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO).
En el documento "Informe Legislativo 2019" el organismo establece que no es función del poder legislativo de los estados dar despensas, juguetes, ni ofrecer fiestas o ayudas económicas y tampoco construir obra pública.
Pero el año pasado, los congresos locales le destinaron el 12 por ciento de su presupuesto a esas actividades, al margen de la ley.
Los que más gastaron en ayudas sociales como porcentaje del gasto total del congreso fueron Guerrero (45 por ciento), Veracruz (36 por ciento) y Tlaxcala (36 por ciento).
En el caso de Tabasco, el poder legislativo se ubica en las últimas posiciones con un 3 por ciento solamente.
Tomando en cuenta que el ejercicio pasado se gastó de presupuesto 295 millones 872 mil 706 pesos, entonces destinó a ayuda social y gestión, un total de 8 millones 876 mil 181 pesos.
El IMCO propone que el ejercicio del gasto de los congresos se haga con parámetros claros de actuación, apegados a la legalidad, austeridad y transparencia.