A unas horas de terminar el primer sexenio de Morena en Tabasco, el gobierno estatal ha desembolsado 111 millones 600 mil pesos para el pago de pensiones graciosas, una prestación discrecional que han entregado los gobernadores anteriores, y que el actual gobierno de izquierda sigue manteniendo a pesar de la austeridad republicana y del programa de Pensión Universal operado por el gobierno federal.
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De acuerdo a los datos proporcionados por la Secretaría de Administración e Innovación Gubernamental (SAIG) a El Heraldo de Tabasco, las pensiones graciosas, un beneficio discrecional otorgado por voluntad del gobernador en turno, le ha costado a los tabasqueños 111 millones 600 mil pesos tan solo en el primer sexenio de Morena.
Si bien los beneficiarios de estas ayudas gubernamentales las recibieron en las administraciones pasadas, éstas se siguieron pagando en el gobierno actual. Los datos de la dependencia que dirige Miguel Ángel Fonz Rodríguez muestran que durante el 2019, el gobierno del estado desembolsó 21 millones 325 mil pesos para el pago de este apoyo, y para el 2020 el monto entregado llegó a los 23 millones 405 mil pesos.
Los datos del organismo estatal también muestran que en los años siguientes la cantidad de dinero destinado para este apoyo ha ido a la baja. Durante el 2021 el desembolso final fue de 20 millones 921 mil pesos, mismo que llegó a los 18 millones 904 mil pesos en el 2022, y cerró en 18 millones 49 mil pesos diseminados durante el 2023.
El reporte de la SAIG entregado a esta casa editorial también muestra que hasta el mes de julio del año actual, a unas semanas de terminar la primera administración morenista en Tabasco, el gobierno del estado ha devengado 8 millones 994 mil pesos bajo la figura de pensiones graciosas.
Así mismo, de acuerdo a datos que la dependencia estatal ha publicado en el Portal Nacional de Transparencia, las pensiones graciosas se componen de un sueldo que va de acuerdo al número de salarios mínimos asignados en la fecha de aprobación de dicha pensión, algunas de ellas datan de antes del 2007 por eso el uso de salarios mínimos, un aguinaldo y una gratificación anual otorgados a fin de año, que únicamente se paga a las personas a las cuales se les concedió una pensión graciosa antes del año 2007.
A pesar de que la federación arrancó el pago de una pensión universal y otros tipos de apoyos para las personas que la requieren, en Tabasco el gobierno que se ha proclamado austero continúa pagando beneficios discrecionales que cuestan decenas de millones de pesos al año.
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